SACA MÚSCULO, pero también en tu mente. Los expertos nos ponen ejercicios para evitar el olvido patológico. Cuanto antes empieces, mejor, pero a partir de los 55 años deberías incorporarlos como una obligación si no quieres que todo se te quede en la punta de la lengua
17 oct 2018 . Actualizado a las 01:07 h.Cuántas veces has llegado a una habitación para coger algo y te olvidaste de qué demonios tenías que coger. O cuántas palabras has querido pronunciar y no has sido capaz, a pesar de tenerlas en la punta de la lengua. Si no quieres que eso vaya a más y se acelere tu deterioro cognitivo, manda a tu cerebro al gimnasio. El jefe de Psiquiatría del Chuac, Manuel Serrano, nos pone incluso edad: «A partir de los 55 o de los 60 años es todavía más importante tanto por el deterioro propio de la edad como para evitar otro tipo de trastornos más graves, como la demencia». Lo primero que notamos, asegura el doctor, es la dificultad para mantener la concentración. Pero no hace falta que llegue la sangre al río, porque los olvidos cotidianos no tienen edad. Lo que tienen, indica, es falta de atención. «Para recordar una cosa, primero hay que fijar la atención en ella. Si no, es imposible almacenarla». Las prisas no son buenas, así que Serrano nos advierte de que no se puede estar a cinco cosas a la vez: «Hay que ser selectivo. Recibimos muchos estímulos, pero no puedes atender a todos». Entre sus recomendaciones está la de leer el periódico, algo en lo que no puede estar más de acuerdo el psicólogo Manuel Lage.
MÁS QUE PASATIEMPOS
La tesis en la que está trabajando, Deterioro cognitivo y recuperación en pacientes alcohólicos, aborda el tema en este tipo de adictos, pero su autor nos confirma que los ejercicios que propone, extraídos de La Voz de Galicia, son aplicables a cualquier persona para prevenir el deterioro o para combatir sus efectos. «El primero es hacer los ocho errores; el segundo leer un artículo y resumirlo; y el tercero, completar el damero», explica Lage, que los puso en práctica dividiendo a las personas objeto de su estudio en tres grupos: uno que hace las tres actividades, otro que ejecuta dos de ellas y un tercero que completa tan solo una.
«En la segunda parte de la investigación sí existe una relación que establece que a más ejercicio, más recuperación. Esto es como ir al gimnasio, pero con la mente», señala el psicólogo, que comenzó su tesis con anterioridad a la salida de la nueva revista de pasatiempos que este periódico entrega los domingos, el Elemental. «Es acertadísima y está muy bien nombrada, porque además de ser elemental, debería de ser obligatorio hacerla», apunta el psicólogo, que ya está escribiendo los resultados de su trabajo y se encuentra finalizando la fase del análisis de datos. «Da igual la razón del deterioro, es bueno hacer ejercicio mental», concluye. Pues ya sabéis, a sacar músculo.
ESTA ES LA TABLA DE EJERCICIOS
1. HAZ LOS OCHO ERRORES
Este es el primero de los ejercicios que plantea el psicólogo Manuel Lage en su tesis sobre el deterioro cognitivo, que está finalizando. Esta actividad es útil para ayudarnos a recuperar la atención. «Sin atención no hay memoria», apunta el especialista.
2. LEE Y RESUME
Al igual que el jefe de Psiquiatría del Chuac, Manuel Serrano, Lage subraya la importancia de la lectura. Otro de sus ejercicios consiste en leer un artículo del periódico y luego resumirlo, para fortalecer la memoria.
3. COMPLETA EL DAMERO
Aunque en el estudio incluye el damero, Lage coincide de nuevo con Serrano al considerar que cualquier pasatiempos es fundamental. «El ‘Elemental’ que entregáis el domingo debería ser obligatorio», indica. El damero lo emplea, además, para la mejora del lenguaje.
4. RECUERDA NÚMEROS DE TELÉFONO
Lage nos anima a tirar menos de la agenda de contactos y obligarnos a memorizar números de teléfono. «Antes lo hacíamos, y es una función que dejamos atrás», indica.
5. CALCULA MENTALMENTE
Otra de las consecuencias de llevar el móvil encima es que nos hemos rendido a la comodidad de su calculadora, por lo que el psicólogo señala que es importante volver a hacer cálculos mentales para reactivar esa habilidad y no oxidarnos.
6. FORMA PALABRAS CON LAS MATRÍCULAS
No te quedes pasmado contra el cristal de la ventanilla cuando vayas en el coche. «Puedes fijarte en las matrículas y formar palabras con las letras. ¿GRN? Granada, por ejemplo», propone el psicólogo.