Cómo ser un diseñador de moda

YES

ANGEL MANSO

LOS DETALLES MARCAN LA DIFERENCIA Y para ser diseñador de moda la clave está en no perderlos de vista. La receta es simple: una pizca de cultura visual, un puñado de pasión y mente abierta a los cambios. Hoy en YES te damos todos los ingredientes.

22 abr 2017 . Actualizado a las 05:05 h.

Hay quien llora con los carteles de Love Actually y quien lo hace al ver el carrusel final del desfile de Prada. Si eres de los segundos puede que tu futuro esté en la moda. Porque en Galicia hay marisco, y muy bueno, y también mucho estilo. Ni Londres ni Nueva York. La cuna de Inditex es una cantera de tendencias, diseñadores y estilistas que se rifan en medio mundo. Pero ¿qué hay que hacer para vivir de la moda? En YES nos ponemos manos a la obra para dar con la receta perfecta. «Lo primero que hay que tener es cultura visual y mucha sensibilidad con lo que está pasando a tu alrededor», cuenta Fernando Suárez, fundador y profesor de la escuela de diseño de moda Formarte, en A Coruña. Primera clave para meter la patita en este mundo. ¿Y la siguiente? «Es importante tener una inquietud estética y que te guste la moda. Y con eso no me refiero a que a una persona le guste ir de compras. Hay que distinguir entre moda consumidor y moda arte», apunta. Y no perder de vista la creatividad: «Estamos muy influenciados por todo lo que nos rodea, pero la creatividad es algo que se educa y se trabaja. No aparece de la noche a la mañana».

Para Fernando, además de cultivar la mente con desfiles, libros o cualquier otra forma de expresión, hace falta dedicarle mucho tiempo a la práctica. «Es imprescindible saber de patronaje, costura y dibujo, y es algo que todo el mundo puede aprender. Cuando vienen a la escuela muchas personas me preguntan si uno se puede dedicar a la moda si no sabe dibujar, y yo le digo que sí. Nadie nació sin esa capacidad. Con un buen profesor y mucho trabajo se consigue», asegura. Se trata, según Fernando, «de ponerle ganas». «Tienes que saber que esta carrera te va a llevar muchas horas porque hay un montón de clases prácticas. Para dedicarse a la moda hace falta tiempo», advierte.

MÁS ALLÁ DEL DISEÑO

He aquí la pregunta del millón. ¿Crear una marca es el único futuro que le espera a los estudiantes de moda? «No, en mi caso, por ejemplo, estudié diseño y siempre ejercí de estilista. Ser diseñador de moda no implica solo diseñar, hay muchas salidas», responde. Entre las profesiones al alza, la de estilista y la de visual merchandising. «Cada vez se consumen más imágenes y tienen más peso las páginas online, donde la gente quiere ver looks bonitos», indica el docente. Y es aquí donde entran en juego los nuevos perfiles laborales. Muchos llegan a las escuelas queriendo tener su propia firma, pero Fernando Suárez asegura que la idea inicial de los alumnos cambia al finalizar los estudios: «Con el paso del tiempo ven que sacar al mercado una marca es difícil y prefieren primero aprender, formarse bien y adquirir experiencia antes de lanzarse a la aventura».

Saint Martins, en Londres, y la escuela de Amberes se llevan la palma a los mejores centros de moda. Dries Van Noten, Stella McCartney o el desaparecido Alexander Mcqueen ocuparon sus pupitres antes de convertirse en estrellas de la moda. «En Galicia hay una industria de la moda muy potente y la formación tiene que ir en esa línea». Para mantener el nivel, Suárez cree que es importante que las escuelas se pongan las pilas «con temarios actualizados y profesores que estén en activo. De esta forma el alumno puede recibir una educación más consistente para triunfar en el mundo real».

Cuatro formas de conseguirlo

1. Cultura visual

Dedicarse a la moda implica tener los ojos abiertos, empaparse de desfiles, arte y libros que ayuden a explotar la creatividad.

2. Trabajo

Y más trabajo. Hay que aplicarse duro para triunfar en este mundo. Aprender patronaje, costura y dibujo. 

3. Actualizarse

No solo el alumno debe estar abierto a los cambios. También las escuelas, con temarios nuevos y profesores que estén en activo.

4. Futuro laboral

Ser diseñador no es la única salida. Hay más profesiones con mucho tirón, como estilista o visual merchandising.