El suministro eléctrico llegó de forma progresiva a distintas zonas de la ciudad a partir de las tres de la madrugada. Los transportes públicos funcionan con aparente normalidad, salvo el tren, y centenares de cajeros tuvieron que reprogramarse a primera hora. La lonja inició su actividad a las cuatro, Stellantis está reactivando una de sus líneas y los astilleros también operan
29 abr 2025 . Actualizado a las 08:16 h.La luz regresó a Vigo a las dos de la madrugada, pero no en todas partes. La recuperación del suministro eléctrico se produjo de forma progresiva, según confirmaron los bomberos. Primero fue en la zona de Teis, Cabral y Sampaio y después, sobre las tres, llegó al centro. Sin embargo, en parroquias como Beade, Coruxo o Navia había hogares que seguían sin luz a las cuatro de la mañana. Más suerte tuvieron en algunos municipios del área metropolitana; por ejemplo en la parroquia de Torneiros, en O Porriño, ya disfrutaban del servicio poco antes de la medianoche.
La ciudad olívica ha amanecido recuperando la normalidad poco a poco. Salvo el tren (Renfe ha anunciado que quedan suspendidos de momento los viajes), los servicios de transporte funcionan. Es el caso de los autobuses de Vitrasa y los barcos entre O Morrazo y Vigo. Tampoco se registran incidencias en el aeropuerto de Peinador, que sigue con los vuelos programados. El servicio ferroviario de media y larga distancia está suspendido de momento.
La actividad económica recobra su pulso desde primera hora. La lonja de altura de O Berbés abrió a las 4.15 horas y la flota de cerco y bajura salió a faenar. La industria también está operativa, con la fábrica de Stellantis en Balaídos a la cabeza, donde funcionaba la línea 1 y se estaba recuperando la línea 2, y los astilleros en la avenida de Beiramar. Tan solo se referían en algunos centros problemas puntuales con máquinas que estaban tratando de reactivar.
Los ciudadanos más madrugadores han ido a los cajeros automáticos de los bancos para sacar dinero, pero se han encontrado con que los dispositivos estaban fuera de funcionamiento a la espera de ser reprogramados.
Jornada del lunes
«Nosotros estamos tratando esto como si fuera un apagón general en Vigo.Tranquilidad y sosiego, lo mejor es quedarse donde está cada uno durante un tiempo. Nosotros estamos tratando esto como si fuera un apagón general en Vigo». El alcalde de la ciudad, Abel Caballero, lanzó este mensaje a primera hora de la tarde del lunes tras el apagón general que sembró una situación caótica en la ciudad.
Las fábricas, supermercados y comercios de Vigo permanecieron parados desde que se produjo el corte de suministro, cerca de las 12.30 horas. Los viajeros se vieron atrapados en las estaciones de tren y en el aeropuerto de Peinador a la espera de noticias. La red semafórica dejó de funcionar (tanto en el casco urbano como en las parroquias rurales), aunque no se registran atascos importantes. La Policía Local envió patrullas para regular la circulación y evitar accidentes.
Puntos neurálgicos y claves tiraron generadores eléctricos, como la terminal de Peinador (por la tarde tan solo se había cancelado un vuelo de Iberia a Madrid, el de las 16.00 horas) y los hospitales, donde hubo que empezar a reprogramar operaciones.
El tren que conectaba Madrid con Vigo paró en el túnel de As Maceiras y los pasajeros bajaron para ir andando hasta la estación de Urzaiz durante unos diez minutos. Adif y Renfe informaron de que se suspendía la venta de billetes. Había decenas de personas esperando en las estaciones. En la de Guixar, la previsión pasaba por mantener los servicios diésel.
En Stellantis Vigo, la primera industria del sur de Galicia, los trabajadores entraron en el turno de tarde, a las 13.30 horas, con normalidad. Fuente sindicales indicaron más tarde que la factoría automovilística de Balaídos se veía afectada también por la falta de suministro eléctrico y sufría interrupciones en su actividad. En la avenida de Beiramar, los astilleros también permanecían a la espera de que volviese la electricidad y se dedicaban a trabajos menores.
El Ayuntamiento activó una reunión del comité de emergencia y seguridad. La situación más urgente fue atender a las personas que se habían quedado atrapadas en los ascensores. Los bomberos y la Policía recibieron unas treinta llamadas por esta circunstancia. También el servicio de emergencias del 112 recibió avisos. En el ascensor público Halo, que conecta Vialia con García Barbón, diez personas fueron liberadas por un operario; permanecieron cerca de una hora en lo alto del elevador y la Policía restringió después el acceso.
Abel Caballero insistía ya por tarde en que lo importante era mantener la calma, cada uno en su ámbito. Pasadas las 14.00 horas, el Concello de Vigo envió este comunicado: «Ante a situación de falta de suministro eléctrico, o Concello recomenda á cidadanía que evite os desprazamentos que non sexan imprescindibles. O mellor, na medida do posible, é permanecer na casa para facilitar o eventual movemento de tráfico dos servizos de emerxencia, así como extremar a prudencia na circulación. Así as cousas, queda suspendida toda a actividade municipal nas instalacións municipais».
Las centralitas de la Policía Local y Bomberos estuvieron bloqueadas por momentos ante la avalancha de llamadas, aunque también afectaba la falta de cobertura.
Algunos ciudadanos hicieron cola en las tiendas barrio, donde se cobraba en efectivo o apuntaban a deber de los clientes conocidos. Otra imagen curiosa se dio con decenas de portalones de garajes abiertos por función manual.