Altares de muertos que unen Vigo con México

Pedro Rodríguez Villar
Pedro Rodríguez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

La comunidad del país norteamericano expone su tradición en varias zonas de la ciudad

02 nov 2024 . Actualizado a las 01:52 h.

Daniela y Julia colocan las flores en el altar con mucho cuidado. Son todas de colores. Las llaman cempasúchil, reciben el nombre de una palabra en náhuatl, idioma indígena mexicano, que significa «veinte flores». En la naturaleza, sus pétalos son de un amarillo muy vivo, «del tono del sol». Por esta razón, los mexicanos precolombinos las utilizaban como ofrenda para sus seres queridos fallecidos. La tradición dice que estas flores dibujan un sendero para que las almas vuelvan a casa por un día. Julia piensa en su abuelo «Chencho» cuando las coloca. Daniela recuerda a los familiares que se fueron. «De pequeñita construía altares con ellos», explica. Las flores dan color a un gran altar de muertos que va tomando forma en el Centro Social Rivera Atienza, en el barrio de O Calvario, donde la asociación Mexicanos en Galicia está dejando un «cachito» de su cultura.

Son días intensos para los mexicanos que residen la ciudad. También es el momento de enseñar que, para su cultura, la muerte «se vive de dos maneras». Está el planto, el dolor de una despedida inesperada y la fiesta, el recuerdo y la alegría de haberlo vivido. «Estos altares son nuestra manera de festejar a las personas que queremos y ya no están», explica Julia. En el de O Calvario hay pan de muertos, «un pan dulce que sirve de alimento para las almas», calaveras de azúcar y otras de cerámica, papel picado con dibujos, velas, fotos y catrinas, esqueletos de mujeres vestidas con tonos coloridos y muy maquilladas. Son los elementos típicos de un altar de muertos en México, pero en O Calvario también hay calabazas. «Es una manera de juntar nuestra tradición con el Samaín», explica Julia, que en otros altares también ha puesto platos de jamón serrano porque «el abuelo de mi hijo es de León y le encantaba», cuenta.

Daniela posa con una catrina que hizo ella misma
Daniela posa con una catrina que hizo ella misma XOAN CARLOS GIL

Julia y Daniela son parte de la diáspora mexicana en Vigo. Ambas vinieron por amor. «Muchas llegamos así», explican. Se enamoran, vienen de visita y, al final, se quedan. Sus apuestas salieron mal, pero ambas han construido una vida en una ciudad «que nos encanta». Se reencontraron con el amor y formaron familias que mezclan varias culturas. Sus parejas e hijos participan en sus altares. «A veces hasta tienen más ganas que nosotras», bromea Daniela. Estas actividades son «una muestra de integración, cultura y una fiesta para compartir con la ciudad que nos acogió», destaca Julia.

Sus inicios no fueron difíciles. Les costó conseguir los papeles, encontrar trabajo y vencer los prejuicios. «Nos duele ver las cosas que se dicen en la calle y en la política», lamentan. Se tuvieron que enfrentar a un sistema que «hace muy difícil regularizar tu situación», indica. Julia recuerda que «hace poco vi un cartel xenófobo en el centro de Vigo y me dio un coraje gigante. Lo quise arrancar, pero al final no me atreví». Al final, sus altares y su asociación, Mexicanos en Galicia, con una forma de romper con este discurso. «Nosotras trabajamos mucho y queremos aportar a nuestra sociedad con toda la ilusión del mundo», insiste. Hoy, sus redes sociales, como sus altares, se han convertido en refugios para mexicanas que, como ellas, buscan aquí su hogar.

XOAN CARLOS GIL

¿Dónde encontrar productos mexicanos en Vigo?

Julia Acevedo ha realizado su propia guía para que sus compañeros encuentren lugares en Vigo para preparar los altares. Hay varias panaderías de la ciudad que se han especializado para dar servicio a una comunidad que hace unos años no tenía donde encontrar su pan de muerto o sus calaveras de azúcar: Son Bekary, donde trabaja el panadero Francisco del Rosal, «pionero del pan de muerto en Galicia», que está en Marqués de Valladares y la de Carracido en rúa Doutor Carracido. Online también están Miralquetartas, que hace calavares de azúcar, y MeLateChocolate. «Todas muy recomendables», destaca Julia.

Acevedo también recomienda el perfil de Karla García, la artesana que hizo las calaveras de su altar, que se encuentra buscando @bico.mexicano.art en Instagram, y las catrinas de Leticia Diaz (@eraseunavezmanualidades).