El bache más peligroso de Vigo

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

Un agujero en el asfalto obstaculiza el tráfico en el carril central de la Gran Vía, en un tramo cuya reforma costó 5,1 millones de euros y donde ha habido accidentes

03 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Miles de conductores tienen que sortear a diario un obstáculo en la Gran Vía. El agujero que se ha abierto en esta calle no podía estar en un lugar más inoportuno: el carril central de la intersección con la calle Venezuela. El suelo se abrió hace casi dos meses formando un agujero de más de medio metro de diámetro. La empresa que llevó a cabo la humanización de la calle hizo un arreglo, pero apenas duró dos días. El firme volvió a hundirse en medio de una las carreteras que soportan el mayor tráfico de toda la ciudad.

El Concello ha vallado esta anomalía que sorprende a los conductores cuando suben desde Urzaiz hacia la plaza de España. Desde la concejalía de Fomento aseguran que están tramitando la reparación ante la empresa que llevó a cabo la humanización en el 2019 para que las obras puedan comenzar a la mayor brevedad posible.

La administración local destinó 5,1 millones de euros en la primera fase de la humanización de la Gran Vía. El proyecto contempló la instalación de las rampas mecánicas hasta la altura de El Corte Inglés. Cinco años después, la calzada se hunde en esta arteria principal de la ciudad. La obra sigue en garantía y la empresa debe hacerse cargo de los desperfectos, que pueden obedecer a un fallo constructivo, pero los días pasan y la situación de peligro continúa.

Los profesionales de la conducción alertan del riesgo de mantener por más tiempo esta situación. Afirman que ya se han producido accidentes, que podrían haberse evitado si se hubiese reparado a tiempo este agujero. Roberto Costas, de Élite Taxi Vigo señala que el lunes un taxista sufrió un fuerte golpe por detrás cuando subía por la Gran Vía. «El bache está en el carril central y genera una retención. Los conductores, al desviarse, corren un gran riesgo. Ha habido accidentes por colisiones laterales», advierte.

El semáforo de la calle Luis Braille se pone en verde y los coches avanzan por los laterales, pero se generan retenciones en el carril central y aumenta el peligro de choques por alcance. «Pusieron un parche, sin solucionar el motivo por el que se hunde la calle. Debe haber una fuga de agua. Algo debe fugar que está minando por debajo de la calle y provoca el hundimiento. Por mucho que le echen pichi por encima se va a seguir hundiendo», señala.

«Ese bache genera conflictos, sobre todo a determinadas horas. Está justo en un cruce estratégico. Las autoridades deben estar al tanto de esta situación», afirma también Emilio Mosquera, presidente de la asociación de autopatronos del taxi de Vigo.

Silvia Pérez, conductora de Vitrasa, señala que este punto es «muy conflictivo» porque coincide con el carril central, tanto si se circula por la calle Venezuela como por la Gran Vía «y te lo encuentras de repente». 

Obstáculo inesperado

El obstáculo obliga a los turismos a frenar porque se lo encuentran de manera sorpresiva. «No hay ninguna señal anterior que indique el peligro. A veces se monta un follón porque los coches se quedan en la mitad del cruce», afirma Silvia. El bache dificulta además a los autobuses que circulan por la calle Venezuela el giro hacia la Gran Vía. «Normalmente necesitamos coger los dos carriles para girar hacia abajo. En época de colegios el follón ha sido bastante importante», afirma esta conductora.

Los usuarios demandan el arreglo urgente de este desperfecto en una avenida tan céntrica. El tráfico en la Gran Vía de Vigo es considerable, con datos del borrador del PXOM que indican un promedio de 28.000 vehículos circulando diariamente por esta arteria principal de la ciudad. Junto con la avenida de Castelao y Castrelos es, con diferencia, una de las vías por las que transitan el mayor número de vehículos, según un informe elaborado por el departamento de Mobilidade e Seguridade del Concello de Vigo, por lo que consideran que debe estar en perfecto estado de mantenimiento y los desperfectos solucionarse a tiempo.