Vigo adquiere obras de la viuda del Marqués de Alcedo

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Los objetos comprados serán expuestos el año próximo en la ciudad

18 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Vigo ha adquirido en una subasta en la localidad francesa de San Juan de Luz obras y objetos de Antonia Bañuelos-Thorndike, la que fuera segunda esposa de Fernando Quiñones de León, Marqués de Alcedo. Las pertenencias eran propiedad de los herederos de esta pintora, la familia Quiñones de León.

Los responsables municipales adquirieron pinturas de Bañuelos, cuadros de la escuela española, un tapete y tapiz con el escudo de armas de la familia, condecoraciones, un armario platero y licorero, piezas de menaje y libros. Según el alcalde de Vigo, es una colección que muestra cómo era la cultura en aquel momento en el Pazo de Castrelos. Estas piezas se encontraban en Biarritz, en el sur e Francia. Pasaron a subasta y ya son de la ciudad.

El alcalde, Abel Caballero, ha informado de que la colección llegará en julio para formar parte del patrimonio de la ciudad, aunque no desveló el precio de la compra. El Concello las va a exponer el año que viene, coincidiendo con el centenario de la donación por parte de la familia Quiñones de León del pazo y los jardines. Enterrados en la oscuridad de una remota villa de San Juan de Luz, estos últimos recuerdos de la marquesa de Alcedo nos transportan al apogeo de la Belle Époque y nos sumergen en el corazón de las grandes familias aristocráticas de Europa.

Antonia Bañuelos-Thorndike nació en Roma, en el Vaticano, donde su padre, el conde Miguel de los Santos Bañuelos y Traval, desempeñaba un cargo diplomático para España. Se casó con María Adelina Thorndike, a quien había conocido cuando trabajaba en Nueva York.

Grande de España

La joven Antonia pasó su infancia en España. En 1891 se casó con Fernando Quiñones de León y Francisco-Martín (1858-1937), marqués de Alcedo, hijo del marqués de San Carlos. El título de su marido acababa de ser creado por la Infanta Isabel de España especialmente para él. Antonia Bañuelos, marquesa de Alcedo entró aún más en el círculo de la aristocracia europea, a través de la rama de los Quiñones, título nobiliario situado entre los Grandes de España. El marqués de Alcedo, nacido en Francia, fue también diplomático, político, escritor y bibliófilo.

En París, Antonia Bañuelos estudió con Charles Joshua Chaplin (1825-1891), pintor francés de estilo rococó y artista oficial del Segundo Imperio, y pintó principalmente escenas de género y retratos.

En 1918 fallecía Fernando Quiñones de León y Elduayen, pasando la propiedad del pazo a manos de su padre, Fernando Quiñones de León y Francisco Martín. Con este noble comenzó a negociar la adquisición de la propiedad el Concello de Vigo. Sin embargo, el marqués de Alcedo más que dinero, quería adquirir la máxima dignidad de la nobleza, ser Grande de España, algo que solo podía concederle el Rey. El alcalde de Vigo, Adolfo Gregorio Espino, usó todas sus influencias en la capital de España para conseguir el nombramiento por parte de Alfonso XIII. El rey accedió a la principal condición del donante y la corporación viguesa acordó satisfacer el importe del timbre impuesto a la concesión de la grandeza de España, que ascendía a 100.000 pesetas.