La flota de Vigo llena el depósito ante la incertidumbre del fin de la bonificación
VIGO CIUDAD
Las armadoras se refuerzan a diez días de que terminen los descuentos del combustible
21 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.«Es una cuestión de oferta y demanda. En apenas 15 minutos, el precio que ofrecen las petroleras por llenar el depósito de un pesquero puede variar significativamente», explica el presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (Arvi). Javier Touza señalan que solo han recibido respuestas ambiguas por parte del Gobierno sobre la política de las bonificaciones que se aplicará a partir del 30 de diciembre.
A solo diez días del fin de los descuentos de la Administración y de las petroleras, el sector pesquero todavía desconoce si figurarán en la lista de los que podrán seguir beneficiándose de rebajas o si tendrán que asumir en sus gastos de explotación una nueva subida. Ante la indecisión, algunas pesqueras han optado por llenar los depósitos de la flota de altura en una semana en la que los precios del crudo experimentan una ligera tendencia a la baja.
«Ha sido nuestra espada de Damocles todo este año», señala Touza sobre la acusada subida del valor del carburante. «Las últimas noticias que recibimos del Ministerio es que podríamos beneficiarnos como sector de alimentación». Desde Cepesca también confían en que ganarán finalmente este pulso y figurarán en la lista de beneficiados, como es el caso de los transportistas.
El depósito de un barco de unos 85 metros de eslora como los que se encuentran amarrados estos días en la avenida de Beiramar puede almacenar hasta un millón de litros de combustible. «Así que nos hemos anticipado», indica el responsable de una embarcación de este tipo. «Es lógico que lo hagamos si en los gastos de explotación de nuestra actividad el precio del combustible figura como un asunto primordial», explica. La rentabilidad de salir a faenar volvería a estar en juego en caso de que no puedan optar a las bonificaciones, opina el sector. Embarcaciones de Grupo Pereira, Pescapuerta y Hermanos Touza son algunas de las que se encuentran amarradas estos días en los muelles de Beiramar. Las campañas de la flota viguesa arrancarán de nuevo a principios del 2023 «y no sabemos qué pasará entonces», indica Touza.
En el caso de las embarcaciones de bajura, señalan que les resulta más complicado blindarse ante un posible fin de las bonificaciones debido a la capacidad de almacenamiento de sus depósitos y a la temporalidad de su actividad, que continúa durante estos meses. «Estamos pagando unos 0,95 euros por litro sin bonificaciones. ¿Qué vamos a hacer si nos las quitan?», se lamenta un armador. «Estamos adaptándonos a todo cuanto nos solicitan desde Europa, desde el Gobierno... Pero es que con estas condiciones no es viable salir al mar».