122 incidencias nocturnas por el temporal de viento y lluvia, con casas inundadas y autobuses atrapados
VIGO CIUDAD
El área de Vigo y las comarcas colindantes fueron las más afectadas por los fuertes aguaceros, que dejaron casi 80 litros por metro cuadrado en Baiona
20 dic 2022 . Actualizado a las 17:52 h.El temporal no dio tregua esta noche, tras sumarse al viento de días anteriores unas intensas precipitaciones, las principales responsables de los más de cien incidentes registrados por el 112 Galicia entre la medianoche y las ocho de esta mañana. Fueron en concreto 122 incidencias relacionadas con la fuerte lluvia, que se cebó especialmente con la provincia de Pontevedra, donde se registraron 82 de esos sucesos.
Vigo y las comarcas colindantes se llevaron la peor parte. El municipio vigués, con 20 incidencias registradas en el 112 a lo largo de la noche, el de Gondomar, con 13, y el de Oia, con 9, fueron los más afectados por la acción de las lluvias.
En la ciudad olívica, el entorno del estadio de Balaídos volvió a inundarse una vez más, provocando que en Internet se ironizase con el parecido de esta zona con una miniVenecia o su capacidad para convertirse en una nueva playa viguesa. Además, el Real Club Celta ha comunicado daños en sus servidores, por lo que ha suspendido de manera temporal la venta de entradas.
De hecho, pasadas las seis y media de la mañana, los bomberos tuvieron que intervenir en las cercanías del estadio para evacuar a la gente atrapada en un autobús de transporte público que se internó en una zona anegada de la que no fue capaz de salir. También hubo averías en el tendido eléctrico, cayeron árboles a la vía en varias calles, se desprendieron algunas chapas de la Cidade da Xustiza y se dañaron algunas decoraciones navideñas.
A algunos kilómetros de allí, en el municipio de Mondariz, el desbordamiento del río Tea provocó la inundación de algunas de las casas de la zona. Los Bomberos de Ponteareas se acercaron a una de las viviendas, en la que había una persona que parecía no poder salir. Finalmente, pudo hacerlo a través del piso de arriba, sin intervención de los equipos de emergencias. Fuentes del Concello han indicado que aunque el cauce sigue crecido, ya está bajo control .Eso sí, una carretera de la localidad está cortada por la caída de un muro.
En Gondomar los que se salieron de su cauce fueron los ríos Zamáns y Miñor, provocando que se anegaran bajos y garajes, entre ellos un aparcamiento con cerca de diez vehículos inundados.
Baiona y Oia fueron los municipios en los que se registraron las precipitaciones más intensas. Según Meteogalicia, en el primero hubo acumulaciones de hasta 79 litros por metro cuadrado, y en el segundo, de 77,5. Poco menos se registró en Fornelos de Montes (73,2 litros por metro cuadrado). Así las cosas, en Oia resultó anegada una gasolinera, y en la carretera que une esta localidad con Baiona se formaron peligrosas bolsas de agua.
En las otras provincias también llovió con intensidad, pero el número de incidencias comunicadas al 112 fue considerablemente menor: en A Coruña se registraron 23; en Ourense, 13; y en Lugo únicamente 4.
En toda la comunidad, los incidentes más comunes tuvieron que ver con riesgos de inundaciones en viviendas, tipología que se repitió en 33 ocasiones. Las incidencias relacionadas con obstáculos a la circulación como tierra y piedras fueron 26, y los anegamientos en carreteras, con 19, también fueron frecuentes a lo largo de la noche. El 112 Galicia registró 16 avisos por bolsas de agua en las carreteras de la comunidad.
Ríos como el Dubra o el Tambre, a pesar de estar en alerta por riesgo de inundación, han aumentado su caudal pero siguen sin grandes desbordamientos, más allá de alguno puntual que en el caso del Val do Dubra originó algún arrastre y algún corte de carretera durante la noche. En Ames, por donde pasa el Tambre, fuentes de la policía local aseguran que la jornada transcurre tranquila, con llamadas por caídas de ramas, pero sin avisos por inundación, aunque el cauce del río va alto.
En la provincia de Lugo la mañana, se ha ido complicando. En Guitiriz, por ejemplo, el Club Fluvial amaneció inundado por el agua del río Parga. En la capital lucense hubo acumulaciones de agua que dificultaron la circulación en puntos conflictivos como el puente que conecta la carretera de Santiago con la N-6.
La falta de visibilidad por la lluvia y el fuerte viento que soplaba en Boiro pudo estar detrás del aparatoso accidente que ha dejado a un hombre herido leve tras precipitarse su coche al agua en el muelle de Cabo de Cruz, quedando parcialmente sumergido. En su ayuda acudió un buceador que pasaba por el lugar, y que logró sacar del vehículo al conductor.
En Santiago la noche vino precedida de todo un reguero de incidentes menores. Volvió a inundarse el complejo polideportivo Fontes do Sar, se formaron grandes bolsas de agua en distintos puntos, se anegó una rotonda en Fontiñas dejando atascado a un coche, y en el barrio de Santa Marta se fue la luz.
La comarca de Arousa ya se fue a acostar en alerta tras una tarde plagada de problemas por las fuertes precipitaciones que colapsaron los sumideros en Vilagarcía, O Grove y Vilanova. En la capital arousana, por ejemplo, el Servizo Municipal de Emerxencias estuvo trabajando hasta las tres de la madrugada vaciando bolsas de agua.
La lluvia inundó locales y viviendas, registrando algunas hasta 20 centímetros de agua. Las bolsas de agua en las carreteras fueron otro de los grandes problemas.
En cuanto al viento, ha amainado ligeramente en las zonas a menos altitud, para cobrar fuerza en las altas. Así, la ráfaga máxima por debajo de los 900 metros de altitud fue de 106,5 kilómetros por hora, y se registró en Oia hacia las cuatro y media de la madrugada. Los otros puntos donde se superaron los cien kilómetros por hora se sitúan ya por encima de los 900 metros de altitud, captándose la ráfaga máxima de la comunidad en Carballeda de Valdeorras, con 136,8 kilómetros por hora pasadas las tres de la mañana.
Noticia elaborada con información de las delegaciones de Vigo, Arousa, Lugo, Santiago y Barbanza