Amante del yoga a los 87 años: «Me siento con mucha energía»

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Josefina Rodríguez anima a las personas de su generación a no ser sedentarias

11 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Josefina Rodríguez Sandes posiblemente sea, a sus 87 años, la practicante de yoga más longeva de la ciudad. Tres veces por semana acude al centro que dirige Jorge Ángel Pereira en Travesía de Vigo. Este profesor de yoga la pone como ejemplo de que nunca es tarde para iniciarse en el mundo de las respiraciones, los estiramientos, la meditación y la relajación. «Josefina es un referente para todos nosotros. A cualquier edad se puede llevar una vida saludable y realizar una actividad física que nos ayude a encontrarnos mejor con nosotros mismos y con los demás», afirma.

Josefina dice que le viene muy bien, tanto para su salud física como mental. Por eso anima a otras personas de su generación a que se animen a practicar yoga o cualquier otro tipo de actividad física que les aleje del sedentarismo. «Me siento joven y con mucha energía», afirma.

Reconoce que llegó al mundo del yoga convencida por su hija, que vive en Zaragoza. Ella ya lo practicaba y sabía que le podía hacer bien a su madre. «Vine, probé, me gustó y me quedé», afirma. Considera que la edad no constituye ninguna limitación para ella. Ya no tiene la misma agilidad que cuando era joven, pero lo importante es la actitud. «A veces me cuesta, pero hago lo que puedo y lo que no, lo dejo. El profesor tiene que tener mucha paciencia con nosotros, sobre todo conmigo», asegura.

«Es una alumna excelente, con una voluntad increíble y anima a todos los compañeros», afirma su maestro de yoga en Axaxha.

La experiencia siempre acaba siendo muy positiva. «Estoy muy contenta. Me encanta que llegue el día de yoga para venir», confiesa. De hecho, a los pocos meses de practicar, ya comenzó a notar sus efectos, sintiéndose más ágil, moviendo las piernas y levantándose con más facilidad. «Cuando llegue a los cien años, no me puedo imaginar lo que haré yo», afirma desprendiendo un gran optimismo. Realizar las diferentes posturas ya le cuesta menos que al principio. Además le ayuda a mantener una postura erguida en su vida diaria y a no estar encorvada. El yoga es una práctica que conecta el cuerpo, la respiración y la mente. Esta práctica utiliza posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación para mejorar la salud general. El yoga se desarrolló como una práctica espiritual hace miles de años.

«Me aporta mucho»

«Me aporta mucho y además he conocido a un profesor muy amable y he hecho unas amistades muy buenas», afirma esta mujer que lleva 47 años viviendo en Vigo, si bien es natural de O Barco de Valdeorras.

Trabajó en el campo, en su casa y también fue emigrante en Suiza durante 17 años. Normalmente, las clases terminan con una breve relajación que también le vienen muy bien. Además de esta práctica milenaria que cada vez gana más adeptos, Josefina afirma que es una persona que acostumbra a caminar mucho, lo que también repercute en tener una buena salud. Otra de las claves que aplica a su vida diaria para estar en buena forma es «beber mucha agua».