Los hechos han ocurrido en un edificio de la calle Zamora
24 oct 2022 . Actualizado a las 12:21 h.Una persona ha sido detenida a última hora de la tarde de este domingo en Vigo acusada de un homicidio por arma blanca, en concreto un cuchillo. La víctima es una mujer residente en el edificio en el que se han producido los hechos, en la calle Zamora de la ciudad olívica, mientras que el supuesto autor sería otro habitante del mismo bloque.
La fallecida tenía 56 años, de nombre María, era trabajadora de limpieza en Alcampo y de nacionalidad española. Vivía en la segunda planta del edificio, el número 70 de la calle Zamora, muy próximo al hospital Povisa. El supuesto asesino, de nombre Pablo, es un hombre de unos 63 años, jubilado de Telefónica, que sus vecinos califican de conflictivo, y vivía también en un piso del segundo nivel. No había denuncias previas, según ha confirmado la Policía Nacional. La previsión es que el detenido pase hoy a disposición judicial.
Varios vecinos escucharon gritos de la mujer desde las 21.05 horas, por lo que llamaron a la policía. Una vecina del mismo piso salió al descansillo al escuchar un grito intenso y después «socorro, socorro». Se encontró las llaves del piso de la víctima en la puerta y una zapatilla en el suelo. Minutos después llegaba la policía, que localizó a la víctima en el interior de su vivienda. A la llegada de los agentes, el ahora detenido salió de su casa, se chupó uno de los dedos ensangrentados, y a continuación habría dicho: «Está muerta», según relatan los primeros inquilinos del inmueble que acudieron ante la llegada de la policía y llegaron a ver el cuerpo de la víctima tendida en el suelo boca abajo.
La asesinada llevaba viviendo año y medio en el edificio, primero en el entresuelo y después en el segundo nivel, el mismo en el que vivía el agresor. Solo una puerta separaba las viviendas de ambos.
Según el testimonio de los vecinos, el hombre llevaba días dejándole notas a la mujer. En los últimos días, afirman, ella ya no le abría la puerta al sentirse acosada, según habría transmitido a los inquilinos más próximos.
Según ha trascendido, el detenido envió hace 20 días una carta a la presidenta de la comunidad de vecinos para quejarse de la «conflictividad» de la otra inquilina. La presidenta de la comunidad asegura que el hombre le enseñó capturas de whatsapp con amenazas de ella y que el vecino que vive en medio de ambos se quejó de sus continuas peleas entre ellos.
La policía se ha hecho cargo de la investigación del suceso, que llevará el Juzgado de Instrucción numero 6 de Vigo. La jueza inspeccionó la vivienda y ya ha autorizado el levantamiento del cadáver, que ha sido trasladado para practicarle la autopsia.
En la calle se creó una gran expectación, puesto que la policía no permitía a nadie entrar ni salir en el edificio mientras llevaba a cabo la investigación y el cuerpo de la fallecida seguía en el interior de la vivienda. Los vecinos se comunicaban por medio del teléfono o a través de las ventanas para tratar de averiguar qué estaba pasando.
El inmueble es un bloque dedicado en su mayor parte al alquiler, con estudios de una sola ventana, una habitación-salón-cocina y un baño. A lo largo de los años se han producido en el edificio bastantes conflictos vecinales, según relatan integrantes de la misma comunidad.
El asesinato se produjo justo enfrente del lugar donde tuvo lugar otro homicidio en el 2015, en el que un hombre mató a su madre. En el mismo edificio en el que se produjo el crimen fue encontrado hace un tiempo un hombre fallecido por una sobredosis y en cuyo piso acumulaba cantidades ingentes de basura.
Los primeros inquilinos que acudieron al rellano donde se produjo el asesinato, tendrán que declarar en las próximas horas para dar cuenta de los detalles que ayer percibieron y del supuesto acoso al que estaba siendo sometida la fallecida.