Stellantis Vigo retoma la producción al ritmo de 2.400 vehículos al día

Alejandra Pascual Santiago
aLEJANDRA PASCUAL VIGO / LA VOZ

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Stellantis Vigo

Los microchips, la electrificación y la exclusión del PERTE marcan la vuelta

25 ago 2022 . Actualizado a las 20:19 h.

No es una vuelta al trabajo más. La factoría líder del sur de Galicia, Stellantis Vigo, reanuda hoy la producción de vehículos en pleno reto europeo por la electrificación, sumida en una incesante crisis de microchips y tras el esquinazo que le ha dado el Gobierno central, que ha dejado a la fábrica de Balaídos excluida del PERTE de la automoción, del que no ha arañado ni un solo pellizco, tampoco los 43 millones de euros demandados para el proyecto Aries. Pese a todo, la planta retoma las líneas de producción a un ritmo de 2.400 vehículos diarios, el máximo de su capacidad, según señalan fuentes de la factoría.

Una plantilla que rebasa los 7.000 trabajadores es la que se incorpora hoy, dividida en cuatro turnos, para fabricar y ensamblar turismos y furgonetas y tratar de recuperar los cuarenta días de parada que registró Stellantis Vigo en el primer semestre del año debido a escasez de componentes electrónicos. El ritmo productivo anual ronda el medio millón de unidades, lo que ha convertido a la fábrica de Vigo en la planta de coches más rentable de toda Europa hace dos años, según un informe elaborado por la consultora francesa Inovev Automotive.

La vuelta de las vacaciones en Balaídos también coincide con cambios en el catálogo de modelos fabricados. Poco antes del verano, la planta gallega despidió la producción del Citroën C4 en ambas versiones. Lo hizo abriendo paso a la Fiat E-Dobló que, en caso de recibir una buena acogida, podría aumentar su nivel productivo a más de 200 unidades a partir de septiembre. Versiones anteriores de este modelo se ponían a punto en Turquía, de la mano del fabricante Tofas. Los clásicos Peugeot 2008 y e-2008, el Peugeot Rifter y e-Partner, el Peugeot 301, el Citroën Berlingo, el Citroën C-Elysée y la Opel Combo completan la carga productiva en Vigo.

Electrificación

El grupo surgido de la fusión entre PSA y Fiat Chrysler Automobiles (FCA) ya es el líder en España en el negocio de los vehículos comerciales ligeros con una cuota del 46,2 %, según datos aportados por el grupo. Ahora el gigante automovilístico liderado por Carlos Tavares se ha planteado como reto convertirse en el rey de la comercialización de turismos y furgonetas eléctricos, con el horizonte puesto en el 2035 por el fin de la venta de vehículos con motores de combustión. Vigo desempeña un papel clave en este propósito al contar con versiones eléctricas de seis modelos, tal y como presentaron hace casi un año.

Crisis de chips

El director de la planta de Balaídos, Ignacio Bueno, confía en que el segundo semestre de este año suponga una bocanada de aire en cuanto a la logística, captación y acopio de componentes electrónicos (cada vehículo que fabrican necesita casi un centenar de chips). Otros líderes del sector, como General Motors o el grupo Volkswagen, sin embargo, ya han puesto el horizonte en el 2023 o incluso 2024 como los ejercicios en que se estabilizarán las previsiones de microchips. La tensión que sufre el mercado actual también dificulta esta recuperación. Taiwán, China y Corea del Sur acaparan el 87% de la producción mundial.

El proyecto estratégico para la recuperación y la transformación económica (PERTE) ha dejado sin un euro de los fondos europeos a la automoción gallega. Stellantis Vigo aspiraba a un papel protagonista funcionando como elemento tractor de otras industrias. No le han sido adjudicados ni los 600 millones de euros que pidió para una plataforma para coches eléctricos ni tampoco los 43 solicitados para Aries, que compartía con Madrid.