Cuatro firmas se declararon en quiebra y once empresarios pidieron la segunda oportunidad
09 jun 2022 . Actualizado a las 01:25 h.«Esperábamos una avalancha de concursos, pero la avalancha no ha venido y ahora hay menos que el año pasado. No hay una explicación», indican fuentes del Juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo. La cifra de concursos de acreedores en el primer semestre del año es tan baja que han pasado de 24 a 15 en apenas un año. Desde enero, solo cuatro empresas se han declarado en quiebra: el histórico astillero Hijos de J. Barreras, Suministros Navales e Industriales G.G. Avendaño SL, la comercializadora de mariscos Viveros de Vigo y La Automobiliaria (este último ya concluido).
Los concursos de acreedores en Vigo han descendido casi a la mitad respecto al año anterior. En lo que va de 2022, se presentaron en Vigo 15 solicitudes y se declararon once. Un año antes, entre el 1 de enero y el 1 de junio del 2021, se presentaron 24 demandas de concurso y se declararon 16. El descenso en apenas doce meses es del 36 % en lo que respecta a solicitudes y de un 31 % en cuanto a declaraciones.
El astillero Barreras entró en concurso voluntario en enero y el juzgado lo declaró a lo pocos días. Quedó bajo la intervención de la administración concursal única, función que recayó en el bufete vigués Tahice Legal. La firma naval, en manos de The Ritz Carlton Yacht Collection y el fondo inversor americano Oaktree, cayó en situación de insolvencia tras una crisis de liquidez «con la disminución de la actividad comercial y las consiguientes pérdidas acumuladas». En mayo cambió de propietario, al ganar el grupo Armón el concurso de libre concurrencia convocado por el juzgado.
En marzo, cayó la auxiliar Avendaño, afincada en Marqués de Valterra, cerca de Beiramar, y dedicada a aparejamiento naval y trabajos a medida en acero y poliéster. Está en liquidación.
La tercera firma que entró en concurso, según el juzgado, es Viveros de Vigo, dedicada a la comercialización de marisco y con sede en O Berbés. Con 40 años de experiencia, servía moluscos del puerto a la mesa en 24 horas.
La cuarta firma es la concesionaria de vehículos La Automobiliaria SL, con sede en la plaza de Fernando Conde. El concurso fue resuelto y concluido. Está extinguida.
Los otros once concursos presentados desde el pasado mes de enero son promovidos por personas físicas, lo que incluye a empresarios o matrimonios propietarios de sociedades que se acogen a la ley de la segunda oportunidad para empezar de cero. Deben acudir al Registro Mercantil para pedir una mediación y si no hay acuerdo, lo que generalmente ocurre, solicitan la condonación de sus deudas, a excepción de las fiscales, de seguridad social y de gobiernos autonómicos. «Hasta ahora nadie ha llegado a acuerdo y van a concurso», indican fuentes del juzgado. Aclaran que las deudas fiscales y sociales no se perdonan ni condonan y a veces se hacen cargo familiares para salvar al empresario.
Personas físicas
Respecto a los concursos de personas físicas, ya se ha resuelto alguno. En mayo, el juzgado publicó un auto donde concede este beneficio de condonación de deudas a una empresaria viguesa. Le fueron condonados los créditos ordinarios y subordinados y, como estaba hipotecada, se vendió su piso y se le perdonó el dinero que faltaba para completar la deuda que acumulaba.