Cuatro okupas se salvan de un voraz incendio en una casa de Vigo mientras dormían

E. V. Pita VIGO

VIGO CIUDAD

El fuego comenzó pasada la medianoche a la altura del número 190 de la avenida de Ramón Nieto, en Cabral. Hoy por la mañana se reavivó el fuego

06 abr 2022 . Actualizado a las 01:01 h.

Un voraz incendio que se produjo esta madrugada en una casa okupa de dos plantas de Vigo obligó a cuatro moradores a huir a la calle con lo puesto para ponerse a salvo. Resultaron ilesos y solo hubo daños materiales. El fuego se reavivó en la mañana de este martes, a las 8.26 horas, motivo por el que los bomberos volvieron a la escena a apagar las brasas en los escombros. 

El fuego comenzó a las 0.30 horas en la avenida de Ramón Nieto, en Cabral, a la altura del número 190, y afectó a uno de los dos pisos de la casa unifamiliar, que está aislada, en un desnivel de la carretera. Solo hubo que cuantificar daños materiales. El fuego calcinó el piso superior y derruyó parte del tejado.

En el momento del incendio, los cuatro ocupantes dormían. Al oler el humo, se despertaron y vieron las llamas, por lo que huyeron a la carrera. Se trata de tres ciudadanos portugueses, dos de 37 años y otro de 41, y un vecino de Redondela, de 54. Todos están a salvo.

Edificio centenario

El fuego se propagó rápidamente porque la estructura de la casa es de madera aunque la fachada es de piedra. Es un edificio centenario, con más de 124 años de antigüedad. Fue construido en 1898, según consta labrado en piedra en la puerta. Al piso superior se accede desde un puente que une la puerta principal con la carretera.

La intervención de los bomberos duró dos horas y, una vez controlado el fuego, la Policía Local de Vigo precintó todo el inmueble por riesgo de derrumbe porque el suelo está inestable. Los servicios municipales ofrecieron alojamiento provisional a los cuatro okupas pero estos la declinaron. Según testigos, dentro de la casa quedó atrapado un perro.

Reacción de VOX

El presidente de VOX Pontevedra, Álvaro Díaz-Mella, reaccionó al incendio de la casa okupa y dijo que «es una muestra más del descontrol en el incremento de okupas en la ciudad de Vigo, que se ve reflejado en el incremento de procesos judiciales para desocupar viviendas». Criticó al Concello de Vigo porque no desarrolla más medidas para paliar el «problema de la ocupación». Entre sus propuestas cita, por ejemplo, elaborar un censo de viviendas abandonadas, mayor vigilancia policial o negociar acuerdos con los propietarios para que tapien puertas y ventanas. Otra de las sugerencias que promueve esta formación en el Parlamento es «desalojar los edificios sin orden judicial».