La A-55 fue sometida a diversos trabajos de mejora y señalización, pero su perfil sigue haciendo que sea peligrosa, máxime debido al alto volumen de tráfico que soporta, con un notable porcentaje de vehículos pesados, además.
A mediados del 2019 comenzó a redactarse el proyecto, documento técnico y el documento de impacto ambiental de la autovía de nuevo trazado que transitaria en túnel por debajo del alto de Puxeiros para desembocar en O Porriño. Sin embargo, los presupuestos generales del Estado para el 2022 solo contemplan una partida de 100.000 euros, la misma que el año pasado, y aunque se tasaron en 5,8 millones de euros los primeros trabajos, no consta ninguna programación de inversiones en su realización para los próximos tres ejercicios.