Afronta 3.200 euros de multa por disfrazarse de médico y atender pacientes en un hospital de Vigo
VIGO CIUDAD
El acusado daba órdenes a los celadores, examinó a un enfermo psiquiátrico pero fue desenmascarado por una facultativa de urgencias
10 oct 2021 . Actualizado a las 00:53 h.Un acusado se enfrenta a una multa de 3.240 euros por disfrazarse de médico y colarse en el mayor hospital público de Vigo durante dos días y atender a, al menos, un enfermo psiquiátrico y una paciente herida que estaba en un box de urgencias. El supuesto intruso actuó el 23 y 24 de marzo del 2017 hasta que una «colega» descubrió el engaño y alertó a la policía. El juicio se celebrará el día 14 en el Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo.
Según la Fiscalía, el implicado se vistió el día 23 una bata blanca y un chaleco similares a los que usan los médicos. No se sabe de dónde sacó el disfraz. Después, se colgó en la bata una tarjeta y pegó una foto y su nombre. Era parecida a las que usan los sanitarios. Luego se coló en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo y se hizo pasar por un médico a pesar de que no ha cursado la carrera de Medicina ni tener la titulación correspondiente.
Una vez dentro del complejo hospitalaria, empezó a deambular por los pasillos como si fuese uno más de la casa. El primer día nadie sospechó de él. El fiscal dice que realizó «actos propios» de la citada profesión e incluso dio indicaciones a los celadores y vigilantes de seguridad. Su osadía llegó hasta tal punto que atendió a un paciente de psiquiatría.
Al día siguiente volvió a colarse en el Hospital Álvaro Cunqueiro. Vistió otra vez la bata blanca y accedió a uno de los despachos de los facultativos. Luego, entró en la zona de boxes y atendió, al menos, a una paciente del servicio de urgencias que presentaba una herida punzante en la mano.
Todo iba bien hasta que una médica de urgencias reparó en él y desenmascaró al impostor. Al verse descubierto, escapó por los pasillos mientras el personal alertaba a la policía. Más tarde, sería identificado y detenido.
La Fiscalía considera que el implicado cometió un delito de usurpación de funciones públicas (porque fingió ser un funcionario del Sergas). El delito se encuadra en relación con el ejercicio de la medicina en el Sistema Nacional de Salud, y en concreto ejercer como facultativo de Medicina General.