La pandemia logra que baje la trágica cifra de un atropello cada dos días en Vigo

María Jesús Fuente Decimavilla
m. j. fuente VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

De los 184 siniestros del 2019 se ha pasado a 53 hasta mayor de este año

23 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Si algo bueno se puede decir que tiene la pandemia es que ha conseguido lo que no logran por sí solas las normas de circulación, que bajen los atropellos en las calles de Vigo. Se trata de una consecuencia lógica del confinamiento y, por tanto, de la retirada de vehículos de las calles. Los 184 atropellos del 2019, o lo que es igual, uno cada dos días, pasaron a 140 el pasado año, mientras que hasta el 20 de mayo del actual se han registrado 53, lo que indica que se mantiene el descenso.

Otra consecuencia es el descenso en la gravedad de los siniestros. Los 17 del 2019 pasaron a 11 en el 2020 y a cuatro en lo que va de año.

Los despistes estuvieron detrás de la mayoría de los atropellos, según constata la Policía Local. Los días de la semana con más atropellos han sido los martes y viernes, cuando se registraron casi la mitad. Por el contrario, lo de menos siniestros fueron los lunes y domingos. Otro detalle constatado es que siete de cada diez alcances tiene lugar en los pasos de peatones, mientras que el resto de producen al cruzar la calle por cualquier parte.

Muchos conductores achacan una parte de este tipo de accidentes a la mala situación de los pasos de peatones, ocultos por contenedores situados casi al lado. Otras veces se atribuye a l estacionamiento de vehículos en doble fila pegados casi al paso, lo que impide ver con anterioridad si un peatón se dispone a cruzar la calzada.

En lo que se refiere al momento del día más peligroso para este tipo de siniestros, las tardes se llevan la palma frente al horario nocturno en el que se han dejado de registrar al haber menos movimiento como consecuencia de las restricciones horarias por la pandemia y el estado de alarma.

Fuentes de la Policía Local explican que serán muy importantes los datos que se constaten a partir de ahora por dos razones. Por un lado, por la progresiva recuperación de la vida normal con la mayor actividad del comercio y la hostelería y el descenso del teletrabajo. Por otra parte, los cambios en los límites de velocidad deberían de repercutir en un descenso de los accidentes y, por ende, de los atropellos. El resultado está por ver. De hecho, un mes después de la entrada en vigor de las nuevas señalizaciones de tráfico la mayoría de los conductores siguen circulando a la misma velocidad que antes. No hay más que echar un vistazo en el tramo de Gran Vía que va desde la plaza de España a Urzaiz, donde la señalización de 30 por hora parece invisible, a juzgar por el resultado.

ORAL, el servicio de cobro de multas de la Diputación, constata que el 90 % de las sanciones se pagan de forma voluntaria en el período estipulado, creciendo en torno a once puntos. Así lo demuestra la tramitación delegada que ejerce en 32 concellos.