Vigo ordena, a petición de Italia, la expulsión de la UE del albanés condenado en mayo por robar en una casa

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M. MORALEJO

La jueza envió ayer al implicado a un centro de internamiento de extranjeros de Madrid para que espere allí por su deportación

03 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El joven albanés E. J., condenado en Vigo en mayo por asaltar un adosado en San Andrés de Comesaña, tendrá que abandonar España y regresar a su país natal, Albania, a petición de Italia. La jueza de guardia de Vigo ordenó ayer que, inmediatamente, sea trasladado a un centro de internamiento de extranjeros a Madrid mientras se dicta la ejecución de la deportación.

El país alpino reclamó la expulsión del sospechoso del espacio Schengen (grupo de países europeos con fronteras compartidas). La orden se remonta al 2017, cuando el implicado residía ilegalmente en Italia y estará vigente hasta el 2022. El implicado se esfumó pero, en otoño del 2020, fue detectado en Barcelona, donde vivía sin papeles. Fue detenido en noviembre del 2020 en Vigo tras perpetrar un asalto a un adosado de la calle Viveiro. Ingresó en prisión provisional en A Lama y el pasado 10 de mayo, el Juzgado de lo Penal número 3 de Vigo lo condenó por conformidad a 2 años de cárcel.

En dicha vista, la Fiscalía se negó a sustituir la pena de prisión por su expulsión del país. Pero, no obstante, el abogado pidió la suspensión de la ejecución de la condena porque solo le cayeron dos años, era su primer delito en España, no tenía otras causas pendientes, no debía pagar indemnizaciones y tenía domicilio fijo en Barcelona. Al cumplir todos los requisitos legales, el tribunal lo dejó libre y el lunes salió libre de la prisión de A Lama. Mientras esperaba a conseguir un billete para Barcelona, se alojó en un hotel de Vigo pero estaba indocumentado y la policía lo detuvo por carecer de papeles. Luego supieron que Italia reclamaba su expulsión de la UE.

El Juzgado de Instrucción número 6 de Vigo, en funciones de guardia, confirmó ayer su expulsión de la UE y ordenó que sea trasladado a un centro de internamiento de extranjeros en Madrid. Allí tendrá que esperar confinado hasta que el juez ordene la ejecución de su deportación, trámite que cuenta con un plazo de 60 días. Luego, la policía lo escoltará hasta que suba al avión.

Fue un «policía de balcón» el que vio el 25 de noviembre a la banda del Este merodear por el barrio y dio la alarma. Los cuatro miembros encapuchados desvalijaron una casa vacía y escaparon por un bosque pero él resbaló en una charca y la policía, que disparó al aire, lo capturó. Hace tres semanas, E. J. aceptó dos años de cárcel por el asalto en Vigo, ejecución que la jueza suspendió unas semanas después. En la vista, se declaró culpable de un delito de robo con fuerza en casa habitada.