Diccionario de vigués: palabras y expresiones míticas de Vigo que solo conocerás si creciste en la ciudad

Laura Míguez Rúa
L. Míguez VIGO

VIGO CIUDAD

Más allá de las fronteras de la ciudad suenan extrañas y puede que no te entiendan. La ciudad tiene su propio lenguaje forjado en décadas de historia local

19 may 2021 . Actualizado a las 21:39 h.

Tener aldea, sobre todo en Ourense, quedar en la farola de Urzáiz o dividir a la gente según la zona en la que sale de marcha (¿eres de Churruca o Areal?) son sellos distintivos de muchos vigueses de diferentes generaciones. Vigueses de nacimiento o de corazón, porque no son pocos los vecinos que llevan tantos años «paciendo» aquí, que ya son más de Vigo que el Sireno. Y junto a todas esas señas de identidad, está la del vocabulario. Expresiones o palabras que nos delatan cuando salimos de las fronteras que marca Chapela o Puxeiros, y que se han convertido en míticas (otra expresión muy viguesa) y por las que se nos conoce. ¿Cuántas de estas usas en tu día a día? Aquí te enseñamos el diccionario de vigués «ilustrado».

Todos los autobuses tienen un nombre: Vitrasa

Aunque nos hemos acostumbrado al color verde chillón recorriendo nuestras calles y subiendo nuestras cuestas, los primeros autobuses urbanos de Vigo eran de color azul. Su nombre, Viguesa de Transportes Sociedad Anónima, Vitrasa, se convirtió en sinónimo de transporte para los urbanitas del sur. Así que aquí ahora ya no se espera por el autobús, se hace cola para subir al Vitrasa. Y da lo mismo si pertenece o no a la cochera de la concesionaria municipal o si se trata de una firma que cubre un servicio con el área metropolitana. 

El dilema entre mirar y ver

Un vigués de siempre tendrá muchos problemas para distinguir cuando debe usar esta expresión. A ver, repasemos: ver es percibir con el sentido de la vista, mirar es fijar la vista con atención. Por mucho que lo repitamos, parece que seguimos a confundirnos por los tiempos de los tiempos. 

Vai chorar a Cangas

Por supuesto los dichos de los vigueses también pueden salpicar a los vecinos del área. Cuando alguien se quiere quejar lo mandamos precisamente hasta uno de ellos, el cercano concello de Cangas, visible en las mejores panorámicas de la Ría, que se pueden observar desde diferentes puntos de la ciudad.  

XOAN CARLOS GIL

Un tipo es un ghicho

En realidad en el centro de Vigo no es demasiado habitual escuchar el gallego, pero eso no quita que no haya muchos vigueses que lo hablen y otros que directamente presten palabras de un idioma para el otro, o un fenómeno fonético como la gheada. Aquí los tipos son ghichos, tal cual. E incluso se le aplica el cariñoso diminutivo gallego ghichiño, para redondear aún más. 

A casa da collona

Es una expresión que seguro que más de uno ha usado para hablar de una situación un poco caótica y desordenada sin saber a qué se refiere. Eduardo Rolland lo explicaba con todo lujo de detalles allá por el 2012. El nombre aludía a un prostíbulo de la zona de A Ferrería en los años 50. El local, que lucía el nombre de Abanico, era atendido en la entrada por una mujer, Doña Esperanza, cuyo apodo era precisamente ese, La Collona

Aquí los bares ponen patatillas

En Vigo no hay patatas de bolsa o chips, en la ciudad los locales que quieren adornar tu refresco te sirven unas aceitunas o unas patatillas. Esta debilidad nos destapa a los vigueses cuando salimos a otros rincones gallegos, como la de pedir maicitos, cuando nos referimos al maiz frito. En la ciudad más de un local las hace propias y su sabor dista mucho de las embolsadas. 

Oscar Vázquez

Ir al chollo cuando toca trabajar

Qué duros son los lunes cuando toca el despertador y hay que ir al chollo. ¿No sabes de qué hablo? Pues entonces igual no te has criado en Vigo. Aquí el chollo es el lugar de trabajo. Y casi todo el mundo conoce a alguien que cholla en Citroën. Porque no nos engañemos, aunque luego se cambió a PSA y ahora se llama Stellantis, para el común de los mortales la planta de Balaídos siempre será Citroën. 

Las fanequeras para ir a la playa

Parece que vuelven a estar de moda, así que este verano igual te toca volver a la tienda a buscar ese calzado de plástico, reservado sobre todo para los niños, con el que acudías en tu infancia a Samil. La incomodidad de correr mientras las arenas entraban y salían a su antojo no era discutible, había que blindarse contra las fanecas, medusas y otros peligros. Se puede sustituir por cangrejeras o sandalias, si quieres disimular tu origen.

Cuando llegan las elecciones, llega el pichi

No, no es el modelito de ropa de tirantes que tanto usabas de pequeño, es el asfalto que recubre las calles, sobre todo justo antes de las elecciones. En Vigo los camiones que reparan las carreteras con esa masa de color negro son más habituales, como en la mayoría de los lugares, cuando los ciudadanos están llamados a votar. 

Oscar Vazquez

Para el Rebullón

Para las próximas generaciones esta expresión perderá sentido, puesto que las instalaciones hospitalarias del Rebullón echaron el cierre en el 2015. Pero para muchos este centro psiquiátrico fue un referente, y de igual modo que en Santiago se usaba la expresión de Conxo, aquí se empleaba la de Rebullón, situado en Mos