Tres de cada cuatro gallegos viven ya en A Coruña o Pontevedra

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

Galicia perdió en el primer semestre del año pasado 3.874 habitantes, ya con el covid contribuyendo a una mayor mortalidad

26 feb 2021 . Actualizado a las 17:15 h.

Galicia se polariza poblacionalmente cada vez más. El eje residencial se va escorando progresivamente hacia el espacio costero que se traza entre A Coruña y Vigo y las áreas metropolitanas que se conforman alrededor de infraestructuras de comunicación como la autopista AP-9 y el trazado ferroviario del eje atlántico. La actualización de las cifras de población que gestiona el Instituto Galego de Estatística establece que el 76,5 % de los 2,69 millones de habitantes de Galicia viven ya en las provincias de A Coruña y Pontevedra. Son 2,3 puntos más que en el arranque del siglo XXI y 9 puntos por encima de la foto fija de hace 50 años, cuando el censo de la comunidad era casi idéntico al de hoy.

Se intensifica pues en los últimos años la concentración sobre la costa oeste y lo mismo ha venido pasando hasta ahora con el papel de las principales urbes, en las que se concentra el 39 % de los residentes en Galicia, cuando en el 2002 eran el 37,9%.

Todas las ciudades aumentaron en número de residentes entre enero del 2019 y las misma fecha del 2020, salvo los casos de Ferrol y Narón, foco territorial en declive poblacional y envejecimiento marcado. Pero sin embargo, el comportamiento no ha sido el mismo en la primera mitad del 2020, con la crisis del coronavirus ya desatada y muestras de un incipiente cambio de preferencias con la búsqueda de inmuebles en el extrarradio tras los efectos del confinamiento que se vivía en esos meses. Las cifras de mortalidad, más elevadas por la pandemia también, han contribuido a un descenso de población en las ciudades, aunque también en el conjunto de Galicia, lo que hace que la relación del área urbana respecto a la rural se mantuviese invariable a la altura del verano respecto al comienzo del año. Toda la comunidad perdió en los primeros seis meses 3.874 habitantes, bajando de la barrera de los 2,7 millones.

Las ciudades marcaron la pauta de esa dinámica. A Coruña bajó en 1.534 residentes en el primer semestre, según los datos difundidos por el IGE. Vigo descendió en otros 911; Pontevedra 394; Lugo 357; Ourense 270; Vilagarcía cedió 257; Narón otros 75 y solo Santiago creció con 200 nuevos vecinos y, sorpresivamente, Ferrol en otros 20.

Lo contrario ha sucedido en núcleos rurales que de enero a julio han experimentado un salto inusual en su volumen de población, destacando los incrementos consignados en Mondariz Balneario, Chandrexa de Queixa, A Teixeira, Valdoviño, A Capela o Entrimo, los que más crecen.