Bares con terrazas cubiertas en Vigo: aquí puedes ir a comer pese al covid y la lluvia

Tocado y hundido. El sector hostelero de Vigo, como el de la mayoría de Galicia y el resto de España, trata de sobrevivir como puede a la pandemia del coronavirus y las restricciones de los diferentes gobiernos. Desde el jueves pasado, en el caso de la ciudad olívica los amantes de sentarse a la mesa fuera de su casa y que le den la comida hecha se han quedado con menos alternativas. La nueva norma de cerrar el interior de bares y restaurantes obliga a los clientes a quedarse en las terrazas. Y con la amenaza de encadenar temporales... la comida del mediodía fuera de casa se pone aún más complicada. 

Pero aún existen alternativas en la ciudad donde te puedes proteger de la lluvia y cumplir las normas por el covid-19. Terrazas donde los toldos superiores se complementan con laterales, con estufas para ayudar a llevar el frío, patios protegidos o soportales son los aliados perfectos para que restaurantes y bares de Vigo puedan seguir trabajando e intentando sobrevivir al cierre. Aquí te contamos algunos, pero no dudes en añadir en comentarios todos los que conozcas y recomiendes!. 

Casa Manolo

Camiño Espiñeiro, 29. 986 26 47 52

Este local especializado en mariscos y pescados que regenta con buena mano María Jesús Méndez, conocida como Pilu, tiene una terraza que es de lo más codiciado en estos momentos. Protegida por muros y con un toldo superior que evita las inclemencias del tiempo, la apuesta se completa con unas estufas para que los comensales puedan estar cómodos. «No es como para estar en manga corta pero sí sin abrigo. Somos unos privilegiados», explica esta empresaria. De las 80 personas que podían albergar en sus buenos tiempos ahora se reducen a veinte, la mitad del aforo de su terraza. El servicio arranca sobre las 13.00 y ofrecen siempre 5 o 6 pescados y otros tantos mariscos, todo fresco y con opción de cocinarlo a la brasa. Pese a esa terraza, como es lógico, la situación pasa factura, una de sus empleadas ha tenido que acogerse al ERTE y otra está a tiempo parcial. «Lo peor es no ver futuro, porque igual en 15 días o menos nos cierran del todo». Para disfrutar de este pequeño lujo en el corazón de Teis es casi imprescindible reservar. 

Restaurante Mirador Monte Cepudo

Calle E, 14, 36360 Valadares. 986 68 79 79

En este caso el espacio no es un problema, aunque sí el clima. Este restaurante con vistas privilegiadas dispone de dos terrrazas enormes aunque solo están protegidas del viento y la lluvia un número limitado de mesas. De momento su responsable apuesta por mantenerse tanto en local como para llevar. «Voy a esperar siete días por los empleados e intentar que no todos sean gastos, pero es muy difícil aguantar así», explica Carlos Rial. Según explica, tiene encargados algunos toldos para aumentar la capacidad de terraza cubierta y espera que el sol vuelva y le ayude a superar esta crisis. «Entre las dos terrazas que tengo ahora son 200 nmestros y voy a hacer otra en el mirador que sumaría otros 200 pero todo esto solo se puede aprovechar en función del tiempo», explica este hostelero. Para sobrevivir han establecido dos turnos de comida, uno desde las 13 y hasta las 15.15 y otro a partir de esa hora y hasta cierre, a las 18.00. Para asegurarse mesa mejor reservar.

La terraza de Cortegada

Avenida Ramón Nieto, 324. 660 29 66 13

Un patio con vistas a un jardín exterior cuidado y varios toldos son la clave de la terraza de este local, que se completa con unas estufas para mayor comodidad. Con mesas separadas cumpliendo el reglamento y aforo reducido desde La terraza de Cortegada pelean contra la crisis con unas diez meses a las que ofrecen menú del día y las delicias que preparan en su parrilla grande de carbón. «Además del churrasco, cada fin de semana llevo cortes variados o pescados, para este lubina y picaña. Además tenemos tapas, bocadillos, platos combinados...», explica Emilio Mejuto.

La Aldeana

Rosalía de Castro, 6. 660 29 66 13

Este mítico local del centro de Vigo siempre se sirvió de su buen hacer con la comida y su terraza para trabajar, debido a las escasas dimensiones del local. Buena parte de las 10 o 12 mesas que colocan ahora en la calle están cubiertas de toldos y cuentan con reserva previa, por lo que conviene llamar con antelación. Como es habitual, el pulpo, las empanadillas, la tortilla o las croquetas vuelan, sobre todo entre los trabajadores de la zona. 

Tapería Mondariz

Canceleiro, 5. 986 63 29 36

Los amantes de las tapas tradicionales tienen el día salvado con este local, en pleno centro de la ciudad. Disponen de una terraza abrigada en la parte anterior del restaurante y allí todavía trabajan con los clientes que ocupan sus cuatro mesas. Ahora mismo el trabajo se reparte solo entre dos y el horario habitual para comer es de 13 a 16.00 horas. Junto al pulpo, los calamares o los mejillones también hay zorza, oreja o palitos de pollo para disfrutar y estar al abrigo de la lluvia. Ofrecen menú del día por 8,90 euros de lunes a viernes, según cuenta Juan Antonio Carrera. 

El Mucanijo

Inés Pérez de Zeta, 2. 986 63 29 36

Tres toldos y una ubicación privilegiada son las herramientas de esta bocatería para intentar hacer frente al coronavirus y al mal tiempo. El local abre de 7.30 a 16.30 y ofrece en sus tres mesas todo tipo de bocadillos, hamburguesas y platos combinados, según explica Isabel del Río. 

La Exscama

Rosalía de Castro, 32. 986 13 71 07

Bajo los soportales de Rosalía de Castro aún se adivina algo de movimiento. Junto a los bares de refrescos o copas este restaurante intenta mantenerse en pie pese a los tiempos complicados que corren. Tienen tanto su terraza que da a la calle como la trasera, ahora sin cierres laterales para ayudar a la ventilación pero igualmente cubierta por la parte superior y en una zona muy acogedora. Su especialidad son los pescados aunque también sirven unas carnes excelentes y unos arroces y mariscos deliciosos. 

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