Vigo registra la menor actividad judicial de este siglo

E. V. PITa VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

Los tribunales solo repartieron 41.354 pleitos en todo el 2020 por la pandemia, un 9 % menos

06 ene 2021 . Actualizado a las 01:08 h.

El parón provocado por la pandemia del covid redujo un 9,4 % el volumen de pleitos repartidos en los tribunales de la ciudad en el 2020. En total, solo entraron 41.354 demandas y denuncias, la cifra más baja del lustro y, probablemente, del siglo en Vigo. Son 4.308 causas menos que las tramitadas en el 2019. El descenso duplica la bajada durante la huelga de funcionarios gallegos del 2018, que duró tres meses y en el que entraron 1.887 asuntos menos de lo usual.

Los tribunales de lo civil de Vigo han sido los únicos que apenas registraron descensos de su carga de trabajo durante la pandemia. Su actividad quedó «congelada» en el año del covid, casi a la par que el ejercicio anterior. En total, entraron 18.249 demandas nuevas, solo 565 menos que en el 2019, un descenso del 3 %.

Algunos asuntos de lo civil incluso subieron en plena crisis sanitaria y económica, sobre todo los relacionados con las reclamaciones de deudas a morosos. Por ejemplo, los procedimientos monitorios (pequeñas reclamaciones por recibos o consumo con tarjeta de fidelización) se dispararon a 6.746 casos, cifra récord del último lustro. Son casi 700 más que en el 2019. Esto se explica porque los llamados fondos buitre, que compran lotes de deuda a bancos y operadoras, siguieron reclamando dinero a los morosos de Vigo en plena crisis económica por el parón del covid.

Lo mismo ocurrió con los pleitos verbales y ordinarios generales, también relacionados con deudas pero en los que el litigante reclaman sumas más cuantiosas (indemnizaciones a aseguradoras, por ejemplo). Se tramitaron 3.538 casos de este tipo en conjunto, casi 200 más.

La crisis del covid también golpeó a muchos particulares arruinados que se acogieron a la ley de la segunda oportunidad para empezar de cero y pidieron un concurso de acreedores. En el 2020, se alcanzaron los 85 casos, 29 más que el año anterior. Lo mismo ocurrió en el juzgado de lo mercantil (dependiente de Pontevedra). Allí, los empresarios que piden librarse de sus deudas presentan un tercio de los concursos de acreedores a pesar de que hay una moratoria.

En lo civil, también hubo más internamientos en psiquiátricos que hace un año, subieron las rupturas entre parejas de hecho y los recién divorciados reclamaron más medidas provisionales.

Por contra, el resto de las jurisdicciones vivieron importantes descensos. Destaca el juzgado de Violencia sobre la Mujer, que registró 926 asuntos penales, 91 menos que hace un año, con una bajada del 8,9 %. La gestión de los divorcios de maltratadas cayó un 17,7 % porque, durante el confinamiento, no era una actividad preferente.

El descenso más acusado (un 23 %) fue en los tribunales de lo penal porque, durante tres meses, solo celebraron los juicios urgentes con preso. Acabaron el año con 950 vistas, 285 menos que en el 2019. Solo subieron los juicios por hurto.

Los ocho juzgados de Instrucción contabilizaron 15.048 denuncias o investigaciones, la cifra más baja del siglo. Son 2.833 menos que en el 2019 (15,8 %). Al desplomarse la criminalidad en el confinamiento, la policía presentó menos atestados.

Las demandas en los seis tribunales de lo social disminuyeron un 7,9 %. Apenas hubo 5.380 pleitos laborales, 464 menos.

En el contencioso-administrativo, con 722 reclamaciones, la reducción se contuvo en el 5,4 %.

Las demandas de cláusulas suelo se desplomaron un tercio y solo entraron 1.051 por goteo. Suman 3.800 casos sin resolver.

En los últimos tres años, los tribunales han sufrido dos súbitas caídas de carga de trabajo, por la huelga y el covid. La ley eliminó los delitos de insultos y accidentes, lo que contribuyó a agilizar las instrucciones. Aún así, los juzgados vigueses arrastran una herencia de 23.700 casos pendientes de resolver.