Los tres detenidos de la Travesía tenían una escopeta y 10.000 euros en billetes

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

La jueza los puso en libertad con cargos. Declararon por videoconferencia debido al covid.

12 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los tres detenidos en la redada antidrogas del jueves en el edificio Fenosa de la Travesía de Vigo guardaban casi 10.000 euros en efectivo en sus viviendas y tenían armas de fuego, en concreto una escopeta y una pistola, posiblemente de fogueo, y una catana. Además, guardaban en sus casas casi medio kilo de hachís y cocaína valorada en 13.000 euros. Otro dato curioso es que admitían el pago de droga con la entrega de móviles como trueque.

El Juzgado de Instrucción número 5 de Vigo, en funciones de guardia, decretó ayer la libertad provisional, comunicada y sin fianza de los tres detenidos en la Travesía de Vigo. Están investigados por un delito contra la salud pública y la Justicia seguirá un proceso contra ellos.

Los arrestados, con edades de 59 años, 55 y 28, quedaron libres con cargos tras comparecer por videollamada ante la jueza. La comisaría optó por celebrar una videoconferencia desde los calabozos porque uno de ellos dio positivo en una PCR.

Los registros policiales se centraron en un piso en el bloque 209 y otro en el 211, así como un bajo comercial que era almacén. Los implicados tenían armas de fuego y munición en sus casas, dentro de un edificio de tres bloques habitado por cientos de vecinos. La escopeta contaba con doce cartuchos del calibre 22. Es pequeño pero popular y barato. Respecto a la pistola, todo apunta a que es de fogueo. También estaban armados con una catana, un sable curvado de estilo japonés.

Los registros judiciales en las viviendas hallaron droga suficiente para traficar a pequeña y mediana escala. Guardaban 497 gramos de hachís, 106 gramos de cocaína (si la hubiesen vendido obtendrían 13.000 euros), y varias dosis de heroína. Estaba preparado para la venta en un auténtico supermercado de la droga en el que habían convertido el edificio, según las denuncias vecinales.

Un «laberinto»

Una prueba de su actividad es que disponían de básculas de precisión, presumiblemente para pesar las papelinas.

La policía llegó a decomisar una docena de móviles y los agentes sospechan que los implicados habían recogido algunos como medio de pago. Los vecinos recelaban de que los trapicheros admitían objetos robados como pago en especie.

El despliegue para arrestar a los implicados movilizó a nueve furgones de los antidisturbios (UIP). Las características del edificio de Fenosa requerían desplegar a un gran número de hombres para cerrar todas la salidas. El inmueble dispone de largos pasillos que comunican los tres bloques porque el arquitecto diseñó extensos corredores de luz. Es usual que, en cuando llega la policía, los sospechosos escapen por los patios traseros o salten por la ventana del primer piso o se esfumen por la puerta superior de los dúplex.