«Solo 7 de las 30 salas de cine que hay en Vigo son accesibles para discapacitados»

Begoña Rodríguez Sotelino
b. r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

El responsable del certamen reconoce el avance del festival, pero no el social

11 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Festival de Cine Inclusivo de Vigo iniciará el martes de la semana que viene, el 13 de octubre, su quinta edición. Su responsable, Gonzalo Suárez (Vigo, 1979), no puede ser más adecuado para el cargo. Trabaja en el sector audiovisual y ha sido profesor en el EISV de Bouzas y en la Egaci, la escuela del Marcote. Hasta tiene nombre de director de cine y además, conoce bien las trabas que sufren las personas con movilidad reducida, porque va en silla de ruedas desde que un accidente le produjo una lesión medular teniendo 26 años.

-El festival cumple cinco años y además de una función cultural, tiene detrás una misión social ¿Qué han conseguido?

-Respecto al festival, hemos logrado situarlo en el panorama de certámenes de cine en España. Ya tenemos hasta imitadores. En cuanto al objetivo social siempre hemos buscado dos cosas. La principal es hacer el cine accesible a todo el mundo, porque no solo existen las barreras físicas. También están las sensoriales y eso lo hemos logrado a través del subtitulado y la audiodescripción. Las personas que tiene esa discapacidad pueden disfrutar en el certamen de películas así, y además de cortometrajes, a los que es más difícil aún acceder. El apartado de sensibilizar a la población se hace seleccionando filmes que tratan la exclusión desde muchos puntos de vista pero de una forma directa.

-¿Por qué se hace la audiodescripción solo con los cortos a concurso?

-Porque no tenemos capacidad económica para más. Nos encantaría hacerlo con toda la programación. Lo lógico sería que las películas se produjesen y llegasen ya así, con un partida destinada a que fuesen accesibles.

-¿Cómo funciona?

-En colaboración con la ONCE, que tienen la app AudescMobile. Nosotros hacemos la audiodescripción y ellos la suben a esta plataforma. La persona llega al festival con el dispositivo digital y otro de audio, y cuando empieza el filme, se sincroniza con la proyección.

-¿Siguen con la idea de lograr que este festival pierda el apellido Inclusivo y termine siendo el Festival de Cine de Vigo, sin más?

-Sí, porque significaría que ya no necesitaría ese apéndice porque no habría que recordárselo a la sociedad. Lo dijo Javier Fesser cuando vino como invitado y lo hacemos nuestro.

-¿Ha habido algún movimiento por su parte o la del Concello para que eso sea realidad?

-No. Ha habido conversaciones oficiosas, pero no lo hemos abordado formalmente. De todas formas, con ‘i' de inclusivo también podría ser el gran festival de Vigo. Lo que cuenta es el programa y lo dinámico que se vuelva con la población. Te encuentras festivales por ahí que se replican en un pueblo y en el de al lado sin ninguna personalidad.

-Además de la concienciación ciudadana, ¿ha habido avances que faciliten que las personas con discapacidad y problemas de movilidad tengan más fácil, por ejemplo, ir al cine?

-No. Eso no se ha logrado. Hay muchas problemáticas disgregadas.

-¿De 30 salas de grandes multicines que hay en Vigo, cuántas plazas hay para discapacitados?

-Muy pocas, pero antes de eso está el problema del acceso. Ese es el primer escollo. Hay algunos cines a los que solo se puede ir por escaleras, no hay rampas. Luego hay otros a los que puedes llegar, pero te colocan en la primera fila partiéndote el cuello. Hay otro cine que en alguna sala tiene escaleras y en otras tiene rampas. Solo hay siete salas accesibles en Vigo. El número de plazas es relativo, porque algunas dejan huecos para sillas de ruedas, pero la gente que no puede subir un escalón puede pasarse a un asiento, como es mi caso.

-El festival se celebra en el Auditorio del Concello y en Salesianos porque sí son accesibles, pero ¿también porque tienen más plazas tienen para personas con movilidad reducida?

-Sí, sin barreras arquitectónicas, y todo el acceso es mediante pendientes. El cine Salesianos es el que más plazas tiene. Es el cine más grande de Galicia en este momento y al ser el más grande, tiene más espacio. Tiene entre 10 y 14 plazas para sillas, una fila entera detrás. En el auditorio municipal de Vigo hay hueco para cuatro sillas de ruedas. Así que sigue siendo una asignatura pendiente, porque con el coronavirus aún son menos.

-Así que el festival de cine es inclusivo, pero la vida real sigue sin serlo...

-Así es. Nosotros luchamos por ello, pero depende de decisiones económicas y políticas que nos superan. Cuando construyen nuevas instalaciones, eso debería estar presente. A ver cómo son las salas de cine nuevas.

Secciones nuevas e invitados en conexiones «online»

El Festival de Cine Inclusivo de Vigo incluirá 28 proyecciones en el Auditorio del Concello y en el cine Salesianos entre el 13 y el 17 de octubre, con aforos reducidos. Esta edición, marcada por la crisis sanitaria generada por el covid-19, está dedicada a los sanitarios y, por ese motivo, varios de los trabajos audiovisuales que se van a proyectar sirven para dar a conocer y valorar el trabajo de los sanitarios. Además, en el acto inaugural se proyectará, fuera de concurso, De chaque instant, de Nicolas Philibert.

Este año el festival crece con nuevas secciones competitivas. Por una parte se divide la parte documental en la sección Vig-In-Doc, en la que se proyectarán tres largos por la inclusión; y la sección Short- In Doc, con seis de cortos. Estas secciones se suman a otra: #Inclusive, de tres largometrajes de ficción y a la sección de cortos de ficción audioescritos y subtitulados, accesibles para las personas con problemas de visión o audición y habrá también intérprete de lengua de signos.

Otra de las novedades es el concurso de webseries online. El público ya puede ver las cinco series que participan en esta primera edición a través de la web del festival y votar su favorita.

En las actividades paralelas solo hay un acto presencial con directores vigueses y la gala de clausura. El resto es online. Una es una charla de Manuel Burque, de la serie Vida perfecta, en cerrado para colegios, y otra en abierto con el actor Miguel Ángel Tirado (Marianico el corto), protagonista de El último show.