Su primer concierto en Vigo, mientras aún daba clases de inglés, fue en La Casa de Arriba y luego en algún otro bar. Después se lanzó a tocar en la calle. Pero como reconoce, no tenía un buen equipo y no lo volvió a intentar hasta conseguir uno que sonara mejor. Ahí sí pudo ver enseguida la reacción de la gente. Así, su primera gira, un circuito cerrado entre Príncipe, O Calvario y los domingos de mercadillo en Bouzas (algo que sigue haciendo, al menos en verano) ha sido su primera forma de sumar fans, que son muchos y muy fieles, antes de publicar su primer disco, que está a punto de salir.
El álbum Part Won (un juego de palabras fonético entre parte uno y parte ganada) ha sido cocinado a fuego lento durante cuatro años y tendrá formato físico además de digital. «En esto he sido pesado, pero era algo que quería hacer. Lo he ido produciendo con mis propios medios junto a un amigo. Las canciones ya están listas. Ahora estoy diseñando la carátula y preparando el primer videoclip. En tres semanas, como mucho, empiezo a lanzarlo todo desde mi web», anuncia. Adrian Timms va a hacer su propio crowdfunding, una campaña de preventa para adquirir por adelantado su disco y el merchandising, para financiar parte de los gastos, hacer algo de promoción y en enero poder hacer la presentación, aunque debido al covid, no sabe si será posible ni cómo. Por ahora, tiene claro que hasta Navidad difundirá a los dos primeros singles. «Quien compre la copia física se lo podrá descargar ya y en diciembre lo tendrá, además, en sus manos. Los que más me siguen lo van a tener primero», explica. Para la grabación juntó una banda de la que forman parte músicos gallegos y algún británico. «Es todo muy orgánico, tocado en directo, con violín, contrabajo, mandolina, bouzuki, mezclando folk, incluso gallego, con el rollo británico r&b y pop rock.