Cantando bajo las mascarillas

Jorge Lamas Dono
jorge lamas VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Allegro es la primera agrupación que activa el protocolo de seguridad de Acopovi

26 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La pandemia del covid-19 ha alterado todas las facetas de la vida, y es capaz incluso de poner mascarillas a los cantantes. La Coral Allegro está mostrando cómo será la nueva realidad de las corales polifónicas al resto de los miembros de Acopovi, la asociación que las agrupa en el municipio de Vigo.

Desde hace unos días ya ensayan su repertorio, pero en unas condiciones muy distintas a como lo hacían antes de mediados del pasado mes de marzo, cuando se inicio la nueva era de la postpandemia. Lo más aparente es el uso de las mascarillas, un elemento obligatorio para espacios cerrados en los que se agrupan varias personas. «El primer día resulta incómodo, pero después te vas acostumbrado y, como digo yo, ya forma parte de mi cara», afirma Preciosa Ucha, la directora de esta formación que tiene su sede en la calle de Ecuador.

En general, el ritual es farragoso, pero imprescindible en una actividad en la que se reúnen muchas personas. «Cuando entramos en el lugar de ensayo, los componentes del coro tenemos que lavarnos las manos, aplicarnos el gel hidroalcohólico y nos medidos la temperatura; lo hacemos con un termómetro, de estos que se ponen en la frente, y que cuestan ochenta euros, por cierto. Es un gasto que tenemos que hacer para prevenir males mayores», explica la directora del coro.

El distanciamiento es otra de las medidas que aplican, pero en un coro llama mucho la atención debido a que su imagen tradicional es de agrupamiento, de concentración de persona que cantan al unísono. «Empezamos con grupos de seis y después [por esta semana] pasaremos a grupos de ocho personas; además mantenemos unas distancias adecuadas entre los distintos miembros, es decir, dos metros entre cada uno, por eso hacemos grupos tan reducidos», añade.

Y todavía no acaban ahí las medidas de seguridad que contempla el coro para esta nueva forma de afrontar las actividades sociales. «Cada hora de ensayo, paramos para ventilar la sala, ponemos el extractor de aire para ello, y volvemos a entrar. Supone mucho trabajo para el director, pero es necesario. Cuando vayamos a ensayar todos los miembros juntos, aprovechando que ahora viene el buen tiempo, intentaremos hacerlo al aire libre en algún sitio», aventura Preciosa Ucha.

Pero volviendo al uso de las mascarillas, la directora de la Coral Allegro añade que no es una gran dificultad. «Se oye bien y problema de sonido no hay; para facilitar la respiración estamos usando la quirúrgica porque es más cómoda, pero hay gente que viene con la FP2. La quirúrgica es la mejor para cantar y si la llevamos todos no hay problemas de contagio entre nosotros», dice la directora de Allegro, que ayer ensayaba con el grupo de las sopranos en su local habitual de la calle Ecuador.