Autovía do Morrazo: 9 meses sin víctimas

Monica Torres
mónica torres CANGAS / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

El desdoblamiento del corredor, que tuvo 80 accidentes graves en doce años, frena la siniestralidad

06 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

En los nueve primeros meses de vida de la autovía de O Morrazo (AG-46), no se ha producido ningún accidente con fallecidos ni con heridos. El balance es especialmente significativo al tratarse del completo desdoblamiento de una vía rápida que llegó a ser denominada el «corredor de la muerte» por su elevada siniestralidad. La prioridad de esta intervención, con una inversión de 55,5 millones de euros y 11,150 kilómetros, era precisamente mejorar la seguridad de los usuarios de la vía que conecta la península con Vigo.

La caída de la siniestralidad ha sido constante desde marzo del 2016, año en el que se iniciaron las complejas obras y en el que aún se registraron cinco accidentes con víctimas y una mortal. A partir de esa fecha bajó el tráfico rodado a la par que se incrementó el de ría porque los continuos cortes por obras desplazaron a los usuarios hacia el servicio público. Entre enero del 2017 y hasta el 1 de enero del 2020, la estadística cayó en picado. En esos tres años solo se registraron seis accidentes con víctimas pero en ninguno hubo fallecidos, según los datos oficiales que constan en la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade. Es decir que, en los 15 años de vida del Corredor de O Morrazo, solo hubo dos en los que no se produjera ningún accidente con víctimas y fueron los del 2017 y el 2019. Hay que reseñar que desde junio del año pasado, momento en el que se acabó la obra, el tráfico volvió a incrementarse alcanzando una media diaria de vehículos de 15.725, con picos de hasta 30.000 durante la época estival debido a los desplazamientos a los arenales de la comarca de O Morrazo.

Han pasado quince años desde la apertura del corredor y, en ese tiempo se registraron 86 accidentes con víctimas, 11 de ellas mortales. El año más negro fue el del 2010, cuando siete personas se dejaron la vida en el asfalto. El último fallecimiento por accidente en el corredor fue el 28 de abril del 2016. Ese día pereció un vecino de Cangas, de 37 años de edad y único ocupante de una furgoneta que impactó de frente contra un camión o a la altura de Meira cuando volvía de trabajar en Vigo.

Las medidas de seguridad que se intentaron antes, como los controles de velocidad con radares o una mediana para separar los carriles no consiguieron frenar la siniestralidad en la que nació con el nombre de vía rápida. Fue preciso un desdoblamiento que tardó casi tres años en completarse debido a la complejidad técnica de la obra, al importe económico y a que tuvo que construirse por tramos.

Desdoblar el corredor do Morrazo en autovía tenía dos objetivos claros y la gran cantidad de accidentes registrados en el 2010 acabaron por convencer a la Xunta de que ya no se podía seguir aplazando. Tanto el de reducir la siniestralidad de la infraestructura como el de aumentar la capacidad de absorción de tráfico en la que es la principal vía de comunicación de la comarca O Morrazo con Vigo, se han cumplido.

La autovía permite un límite máximo de velocidad de 120 kilómetros por hora en la recta de Meira. En el resto, se limita a 100 y baja hasta 90 en los dos viaductos, a 70 en el túnel de Montealegre y cae hasta los 50 o 40 en algunas curvas y en el acceso al enlace de Meira. Las mejoras de seguridad vial incluyeron nuevas señalizaciones.