La cabalgata fue seguida, según el Concello de Vigo, por unas 200.000 personas en su recorrido prolongado
06 ene 2020 . Actualizado a las 20:14 h.Los Reyes Magos quisieron conocer el Paseo de Alfonso XII antes de que comiencen las obras que cambiarán el ritmo de uno de los balcones más bellos que tiene la ciudad de Vigo. Por primera vez en la historia de la cabalgata, la comitiva no concluyó en la Porta do Sol, y continuó un tramo más, permitiendo que muchas más personas pudieran contemplar el singular desfile de la ilusión infantil. Y fueron muchos miles de individuos los que se agolparon en las calles del recorrido, haciendo de esta una de las cabalgatas más multitudinarias de la historia de la ciudad. Según el Concello, aproximadamente 200.000 personas.
Tras realizar el recorrido inverso a pie, el alcalde, Abel Caballero, dio la señal de arranca a través de la megafonía. «Comeza a cabalgata de los Reyes de Oriente de Vigo», gritó el regidor para dar la orden de partida. Fue el gran animador de la marcha. Abel Caballero no paró de saludar y recorrer ambas aceras del trayecto, respondiendo a las continuas llamadas de sus convecinos. Tampoco Baltasar olvidó sus obligaciones como rey mago y movió sus brazos a izquierda y derecha, lanzando caramelos a puñados. Todo un profesional. Más cohibidos, quizá por la novedad, se mostraron Gaspar y Melchor, así como su literata cartera.
El hilo argumental se situó en los espectáculos infantiles. Elfos, Cenicienta, Hansel y Gretel, pitufos y un sinfín de figurantes llevaron la alegría a un montón de niños que se agolpaban por las calles del recorrido. Incluso, se pudo ver un enorme Dumbo confeccionado con un montó de globos de colores.
En total, desfilaron trece carrozas con cerca de 1.300 participantes. No faltaron los bomberos, la Policía Local y Protección Civil, que no cesaron de hacer sonar las sirenas de sus respectivos vehículos.
Al comienzo de la cabalgata, en García Barbón, una ambulancia tuvo que atender y trasladar a una mujer mayor a la que le dio un mareo.