Pereiró es historia de Vigo

Alejandra Pascual, Óscar Vázquez

VIGO CIUDAD

Óscar Vázquez

El Concello organiza visitas teatralizadas al mayor cementerio de la ciudad

31 oct 2019 . Actualizado a las 11:56 h.

No es una tradición tan rara. De hecho, casi una treintena de cementerios de 18 países de Europa forman parte de la ruta de camposantos históricos de la Unión Europea, entre los que figuran el de Roma, Praga o Estambul. El necroturismo está de moda y también llena de vida y curiosidad el cementerio de Pereiró por estas fechas. Desde el pasado 17 de octubre se suceden las visitas guiadas teatralizadas al camposanto organizadas por el Concello. Durante el mes de noviembre, serán los días 2, 3, 7, 8, 9, 10, 15, 16 yjueves 17.

Se trata de una iniciativa que ya gozó de gran aceptación entre el público vigués en pasadas ediciones y que se disfruta a partir de las 19.00 de la tarde, cuando la luz vislumbra pinceladas trágicas a la visita, en grupos de 25 personas. Pereiró se convierte durante esta época del año en una oda al arte funerario, cuyos panteones y monumentos son un interesante conjunto ornamental.

La historia del cementerio se remonta al año 1889, cuando la corporación municipal inició los trámites para la construcción de un nuevo camposanto moderno e higiénico. En aquel entonces se optó por construirlo en la parroquia de Santa María de Castrelos, donde todavía continúa imponente y acogiendo cuidadosamente a figuras históricas y cruciales en la historia de Vigo. En las inmediaciones de Balaídos encuentran reposo personajes emblemáticos como Sanjurjo Badía, Policarpo Sanz, Jenaro de la Fuente Concepción Arenal, la Marquesa de Valladares, Irene Ceballos y Bernardo González del Valle, el héroe de la Reconquista conocido como Cachamuíña. Precisamente, estos últimos cuatro personajes históricos son resucitados por profesionales de la actuación en estas visitas guiadas.

Desde Concepción Arenal hasta Ricardo Mella, comienzo y fin de este recorrido, los visitantes se empapan de la historia de la ciudad a través de kas sepulturas de personajes que dieron voz, negocio o incluso libertad a Vigo. En mitad del recorrido, durante el paseo dirigido por Irene Ceballos, aparece un coche fúnebre de época al que se permite subir. Se trata de uno de los Dodge Ram que adquirió el Ayuntamiento vigués en el año 1938, que es posible encontrar todavía en perfecto estado.