El juez interroga a seis policías locales porque dos sospechosos de robo les acusan de entrar en su casa sin permiso

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Imagen de archivo de un coche de la Policía Local de Vigo
Imagen de archivo de un coche de la Policía Local de Vigo Pita

Los agentes aseguran que perseguían un delito «en caliente» y una implicada abrió la puerta de su vivienda

31 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Seis policías locales de Vigo declararon ayer ante el juez de Instrucción número 2 de Vigo tras ser denunciados por una pareja sospechosa de robo de haber allanado su vivienda sin permiso en julio. Los implicados, supuestamente, se hicieron con un botín de monedas y billetes en una panadería cercana.

El allanamiento de morada es un delito que consiste en que un individuo, sin habitar en ella, entrase en una morada ajena o se mantuviese en la misma contra la voluntad de su morador. Algunos jurados de la Audiencia han estudiado asuntos similares en Vigo pero hubo absolución porque la moradora abrió la puerta al supuesto intruso.

Según la acusación, los seis agentes municipales incurrieron en un delito de allanamiento de morada porque accedieron a la vivienda sin autorización judicial ni permiso de los moradores de la vivienda. Les atribuyen a los agentes, además del allanamiento, que hayan impedido a la pareja llamar al abogado, impedirles ejercer sus derechos cívicos, causarles lesiones en el arresto y practicar una detención ilegal.

Persecución «en caliente»

Los agentes investigaban un robo «en caliente» y alegan que la mujer les abrió la puerta y pudieron entrar a efectuar las detenciones. Al tratarse de un delito fragante, que se estaba produciendo en el momento de su actuación, argumentan que no tenían por qué pedir permiso al juez ni al morador de la vivienda.

La acusación sostiene que el delito de robo con fuerza en la panadería ni siquiera había sido denunciado porque el dueño fue varios días después a presentarla. La pareja sospechosa está libre.

Una de las discusiones se centra en si la mujer dejó entrar en la vivienda a los agentes o no. Mientras ellos dicen que les abrió la puerta, la detenida lo niega todo. Es más, asegura que no quiso dejarles pasar y ellos entraron igualmente sin respetar sus derechos. Otra de las discusiones es si, durante el arresto, la pareja fue lesionada. Los policías lo niegan.

Si el juzgado continúa con la investigación por allanamiento de morada, los policías locales afrontan entre seis meses a dos años de cárcel. Al tratarse de funcionarios, podría ser más elevada. Aquí la discusión estará en si la actuación de los agentes estaba fuera de la ley y sin que mediase una causa por delito. Si hay violencia, sube a 4 años de cárcel.