Juzgan a un jubilado por abuso sexual a una asistenta del hogar ante su esposa paralítica

E. V. PITA VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

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El acusado, que afronta 3.600 euros de multa, y su mujer negaron que hiciese tocamientos a la trabajadora a domicilio que los cuidaba

18 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Un jubilado vigués se sentó ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 2 de Vigo para responder por un supuesto abuso sexual a una joven asistenta del hogar o auxiliar de enfermería a domicilio. Según la ofendida, el acusado, a veces estaba ebrio y le hizo tocamientos incluso delante de su esposa paralítica, postrada en silla de ruedas por un ictus. Afronta una multa de 3.600 euros

El incidente se remonta al 28 de diciembre del 2018. La asistenta del hogar trabajaba para una agencia y cuidaba del matrimonio mayor. Cuando hacía la cama, según ella, el hombre se acercó, le dijo que era su cumpleaños y ella pensó que la iba a abrazar pero se abalanzó sobre ella, la agarró con fuerza con los brazos en la cara, la besó en la boca, y luego pasó lascivamente la mano por sus pechos y glúteos. «No me sentí violenta porque estaba en shock, eso no se le hace a nadie y menos a una persona que va a trabajar a tu casa. Me pareció surrealista, increíble», dijo. Añadió que, a escasos metros, en el sofá y solo separada por un tabique, estaba sentada la esposa de él, pero no se quejó porque «ella tiene parálisis y si se pone nerviosa le dan temblores». Ya en la calle, avisó a su coordinadora para negarse a trabajar más allí.

La ofendida recordó que, otra vez, el hombre se lanzó a abrazarla en el ascensor o le hizo tocamientos en el sofá al lado de su mujer enferma. Él lo niega todo y trajo a su esposa para testificar a su favor, la cual, también negó abusos porque «no es posible».