«A bicicleta aporta sensación de liberdade»

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

VIGO CIUDAD

RAMON LEIRO

El colectivo ha traído al foro público las reivindicaciones y necesidades de los ciclistas en la provincia

14 oct 2019 . Actualizado a las 13:57 h.

Las bicis atraen a todas las edades y sus usuarios están por todas partes. Pedaladas fue una de esas asociaciones pioneras que, hace ya 18 años, empezó a crear conciencia en la sociedad de que los ciclistas son usuarios de un medio de transporte, la bicicleta, que figura entre los más respetuosos con el medio ambiente, con grandes ventajas frente al coche y la moto: no contamina y no hace ruido. «As persoas que van enriba dunha moto non perciben o mundo igual que os que imos nunha bicicleta polo ruído que fan. Ti cando vas pedaleando non sentes nin a cadea, so escoitas o vento e pasar o asfalto», precisa Quique Pérez, presidente de Pedaladas. «Aporta sensación de liberdade», concreta, al librarnos de la tensión de los coches y las dificultades de aparcar, entre otras cuestiones.

El ciclismo es una de las grandes pasiones de Pérez desde que aprendió a montar en bici a los 9 años. Defiende la creación de Pedaladas para reivindicar sus derechos ante la Administración. Para él, los políticos gallegos «son moi tímidos en apostar pola bici e moitas veces consideran que os usuarios de bici son friquis que a escollen por elección propia e que a bicicleta en Galicia e en España non vai triunfar». Es todo lo contrario a lo que él prevé. Desde su punto de vista, los políticos están yendo por detrás de los jóvenes.

La creciente concienciación sobre el cambio climático en la sociedad y la urgencia por tomar medidas contra el exceso de emisiones de CO2 acabarán dándole a la bicicleta un papel todavía más destacado en la vida cotidiana de los pontevedreses. En la provincia, «a curto prazo, o futuro da bici non o vexo moi claro, pero a longo, por fomento de políticas baixas de consumo de carbono, sei que chegarán as vías ciclistas e unha parte importante de desprazementos curtos faranse en bicicleta ou patinete eléctrico».

Vigo, Pontevedra y Vilagarcía son «tres modelos totalmente distintos». «Pontevedra apostou polo acougado de tráfico e non facer rede ciclista e conseguiu que a maior parte dos usuarios vaian coa bicicleta pola beirarrúa». Pérez cree que es posible realizar una red urbana de itinerarios para bicis, como ya le han propuesto varias veces al Concello.

En cuanto a Vigo, «é unha cidade moi agresiva para os ciclistas. Está empezando agora a facer o carril bici. De todas as grandes cidades creo que é das últimas en facelo». Sobre la ciudad olívica, sostiene que «é moi complicado para usar a bicicleta, non polas costas en si mesmas, senón porque os condutores de grandes cidades son moi agresivos». Sobre Vilagarcía, Pérez matiza que la capital arousana «fixo o contrario das outras dúas». Destaca que «apostou pola rede ciclista e ten moitos usuarios de paseo que van polos seus carrís bici, pero non ten tanta mobilidade ciclista como podería, porque a xente segue utilizando moito o coche».

Seguridad vial

Si este medio de transporte respetuoso con el medio y barato tiene tantas ventajas, la cuestión surge en seguida. ¿Por qué la gente se resiste a usarla más masivamente? Aquí Quique Pérez es rotundo. La comodidad al volante gana la partida en aquellos casos donde hay red ciclista pero se permite el tráfico. En otros, donde se limitó mucho, como Valencia, el auge de la bicicleta es muy grande. «Hai que darlle facilidades ao usuario da bicicleta para poder triunfar», precisa. A nadie le gusta estar pedaleando entre camiones y coches. El riesgo de accidentes es muy elevado.

La problemática de la seguridad vial es uno de los temas más complejos del tráfico. En los últimos años, desde la Xunta, se apostó por un modelo de itinerarios comunes peatonales y ciclistas, de los que se están realizando numerosos tramos en la provincia. Es un modelo de vía compartida que el presidente de Pedaladas cree que es «demasiado estreita» para viandantes y ciclistas. «Vai haber problemas de convivencia dentro de pouco», sostuvo. Añadió que no sirven para mucho, además, «ao ser inconexas». Es necesario una red que permita desplazamientos en toda la provincia y entre villas.

Aquí es donde entran en valor las vías verdes como la de Caldas a Vilagarcía, actualmente en ejecución, o la tantas veces demandada de Pontevedra a Vigo, por Arcade e Redondela, que también se podería enlazar con Caldas. Es además una propuesta que tiene un gran potencial turístico, con su repercusión económica.

Pérez puntualiza que hay varias carreteras que merecen una atención especial, por su peligrosidad. «Hai un problema moi grave na N-550, é dicir, todo o percorrido que vai de Padrón a Vigo, con moito usuario de ciclista de estrada e que calquera día hai un morto». Otras sobre las que habría que actuar son la PO-308 de Pontevedra a Sanxenxo, la PO-551 desde Cangas a Moaña, la N-554 de Moaña a Vilaboa. Son deberes que Pedaladas le pone a la Administración, además de dotar de una vez por todas de itinerarios para ciclistas en las ciudades.

Su primera bicicleta la recibió a los 9 años y aprendió a usarla en el patio de su casa en Mollavao, «en dous días despois de dar moitísimos golpes contra o chan», relata.

«No deportivo, é satisfactorio, é divertido, un reto persoal de superación física. No uso diario, sobre todo liberdade».