Para Nelia Bruña, madre de Sara, Abel y Esther, «la conciliación laboral y familiar siempre es una utopía. Cuando tienes hijos siempre hay que renunciar a algo, pero el resultado siempre es positivo». Hija de emigrantes y nacida en París, aunque regresó a Vigo a los 8 años, reside en Salceda desde el 2002. «Vivimos aquí porque mi marido trabaja en O Porriño, pero también por relación sentimental, ya que él tiene aquí familia y además es un sitio con una vivienda asequible y cómodo para vivir», explica. Valora también la accesibilidad «porque la política municipal respalda el día a día con los niños, hacen actividades para la familia, parques, bibliotecas o el aula matinal, que es fundamental». Siempre quisieron tener tres hijos: «Soy muy feliz, siempre hay días más difíciles, pero insisto en que todo compensa y con creces». «Cuando te casas preguntan cuánto vas a tardar en tener un hijo; cuando tienes uno, cuándo vas a por la parejita; y con el tercero, si tienes pensado hacer un equipo de fútbol o para qué quieres otro niño o niña, como si fueran cromos» ,bromea la flamante mamá.