Los notarios han casado a 88 parejas en Vigo desde que lo permite la ley

Alejandra Pascual Santiago
alejandra pascual VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Alejandra Pascual

Rapidez y precio, principales razones para contraer matrimonio por esta vía

07 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde 2015, los notarios tienen la potestad de celebrar actos matrimoniales. Basta la comparecencia de dos personas con dos testigos que en escritura pública firman un contrato. «Los notarios no tramitan el acta notarial, simplemente celebran el acto matrimonial», aclara Jaime Romero, delegado notarial de Vigo.

Casarse por esta vía, sin embargo, es una modalidad que todavía no está consolidadada en la ciudad. Desde que la ley lo permite, en Vigo, Baiona, Nigrán y A Ramallosa se han contabilizado 88 enlaces de este tipo, según datos del colegio notarial de Galicia. En Redondela, por ejemplo, no ha habiddo ninguno. En el 2016 y el 2017 aumentó considerablemente el número de parejas que se apuntaron a la novedad, pero del 2017 al 2018 la cifra volvió a disminuir.

Se trata de una forma de contraer matrimonio que destaca por la rapidez, el precio y la flexibilidad. Las notarías de Vigo, que trabajan cada mañana con un ritmo acelerado, sin embargo pueden pasar meses sin recibir ninguna estas solicitudes, de forma que la lista de espera como tal no existe. Es posible solicitar la escritura de celebración de matrimonio y convocarla para el día siguiente. Mucho más tedioso es citarse con el juez y que este tramite el acta, un proceso que se suele cobrar entre dos y tres meses de espera. «Ante nosotros solamente tienen que presentar el acta que les ha autorizado el juzgado», apunta el delegado notarial como ventaja distintiva. El propio acto es breve, dura solo en torno a diez minutos, en los que se leen tres artículos del Código Civil y después se procede a la firma de la escritura por parte de los contrayentes y de dos testigos.

El precio es otra de las grandes ventajas. De media, casarse ante un notario cuesta 120 euros. «Los contrayentes también reciben un asesoramiento sobre la relación económico-patrimonial que rige en el matrimonio», señala el notario Santiago Martínez como otro gran beneficio al pagar por este tipo de unión de carácter civil.

En el acto se leen los artículos 66, 67 y 68 del Código Civil, por el cual se reconoce la igualdad en derechos y deberes de los cónyuges, el respeto y socorro mutuo y que los contrayentes deben actuar en interés de la familia y guardarse fidelidad, además de compartir responsabilidades domésticas. La celebración matrimonial no está exenta de cierta solemnidad y los notarios de Vigo lo abordan con seriedad ya que no deja de ser la firma de una escritura pública. «Todavía recuerdo varios enlaces en los que aparecieron en la notaría familiares y amigos de los novios, vestidos de punta en blanco y tirando arroz a la pareja en la puerta de la notaría. Resultó gracioso, hasta que tuvimos que barrer nosotros todo el arroz», se ríe Jaime Romero. El delegado notarial, que ha oficiado seis matrimonios, considera le falta implantación porque «por tradición a la gente le gusta celebrar el acto matrimonial como un día especial».