Los taxistas en falda reivindican su opción: ya son seis y serán más

B. R. Sotelino / B. Villaverde VIGO / LA VOZ

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El colectivo presiona así para renegociar la normativa que admita el pantalón corto

30 jul 2019 . Actualizado a las 13:12 h.

Los taxistas de Vigo están en boca de todos desde que algunos de ellos han decidido ponerse faldas para trabajar ya que la normativa municipal les impide ponerse pantalones cortos. Casi un tercio de los que trabajan en Vigo no están de acuerdo con el apartado que regula su vestimenta de trabajo en la ciudad, que les afecta especialmente en verano.

Desde la asociación Élite Taxi se opusieron desde el principio a que la normativa del Concello prohibiera, en cuanto a vestimenta, otra cosa que no fuera el pantalón largo porque consideraban válidas otras opciones.

Roberto Costas, que preside la asociación, explica que empezó uno pero cada día son más los que se suman, y aclara que bajo las faldas se esconden, como mínimo, dos razones: «Lo hacemos por la comodidad y por la reivindicación», apostilla.

Costas añade que sus compañeros están adquiriendo faldas masculinas, «que no son tan fáciles de encontrar y son más caras que las de mujer». Actualmente ya son ya son seis los taxistas que usan falda y el propio Roberto está a punto de ser el séptimo, porque ha encargado la suya, pero no le ha llegado aún el pedido.

El taxista añade que lo que están viendo en la calle, en el día a día, es el apoyo de los usuarios. «Esperábamos toparnos con más rechazo y la verdad es que es al contrario, la gente nos respalda y nos anima de la prenda que para nada es ofensiva», opina. Los taxistas de esta asociación esperan, de todas formas, lograr el beneplácito del propio ayuntamiento a este respecto. «Queremos renegociar este punto. Al producirse el relevo en la concejalía tras las elecciones, hemos elevado un requerimiento de suplica para dialogar con el nuevo edil de Transportes, Javier Pardo. Esperamos que nos reciba y que se acepte la modificación de esta norma tan estricta que ya cuando se tramitó, pedimos eliminar», recuerda.

El conductor indica que siempre estuvieron de acuerdo en que los chóferes de taxis de Vigo no usaran para trabajar indumentaria deportiva ni playera, pero sí que se permitiera un tipo de pantalón corto y un tipo de polo específico. «No un uniforme, pero sí algo que nos identificase. Como si quería el Concello que pusiéramos el escudo de la ciudad en la camiseta. No lo veíamos mal. Pero el Ayuntamiento se cerró en banda y así seguimos», lamenta. El profesional subraya que Élite Taxi no es una emisora, sino un colectivo que agrupa a cerca de 140 trabajadores del gremio, un tercio de los que hay en Vigo. Los nuevos uniformes han creado controversia y opiniones diversas. Su audacia para trabajar frescos sin incumplir las reglas provoca aplausos por solucionar problemas con imaginación. El atuendo les ha llevado a llamar la atención de compañeros de todo el país. «Más allá de que la normativa no lo permita, no tendría por qué ser ningún escándalo social. A quien no le parezca decoroso que un hombre lleve faldas, que revise la historia de la vestimenta», reflexiona.

«Un conductor que está incómodo no presta un buen servicio porque no le sale ser amable»

Élite Taxi ya advirtió hace un año, cuando se presentaron las modificaciones de la normativa, de que llevaría a cabo esta protestas si no se admitía el pantalón corto.

Lo han cumplido y mientras arreglan su tema, los taxistas de Vigo en faldas se han convertido en influencers del siglo XXI. Para justificar su decisión y tratar de aclarar que no se trata ni de un capricho ni una broma. Roberto Costas se explica: «La gente no entiende que pasamos muchas horas en el coche y con calor es insoportable. Aquí, además, cada vez son más los clientes que no quieren, y nos piden, que encendamos el aire acondicionado. Podemos tenerlo encendido en las paradas, que es algo que en Galicia no está prohibido, no nos parece bueno. Estar parados con el motor encendido echando humos por el tubo de escape para poner el aire es súper contaminante, no tiene razón de ser», argumenta. En cambio, le parece lógico reivindicar usando falda, que les permitan volver al pantalón corto. «Al fin y al cabo de lo que se trata es de dar un buen servicio a los clientes con una indumentaria cómoda. Un taxista que está incómodo no presta buen servicio porque no le sale ser amable», sentencia.

Del otro lado está la Cooperativa y Autopatronos del Taxi de Vigo, que preside Manuel Chorén. A este grupo le parecen bien las medidas contempladas en la nueva ordenanza municipal con la que se pretende que los profesionales vayan «aseados y vestidos con ropa normal». Chándal, pantalón corto, camiseta de tirantes y chancletas quedan desterrados, además de actividades como fumar.