Los jefes dimitidos de los centros de salud llaman al nuevo gerente del Sergas en Vigo a abrir un diálogo

VIGO CIUDAD

El personal de los centros de salud (en la imagen, Colmeiro) se ha concentrado este mediodía con letreros que dicen «Falamos...?»
El personal de los centros de salud (en la imagen, Colmeiro) se ha concentrado este mediodía con letreros que dicen «Falamos...?» cedida

Los médicos mantienen sus reivindicaciones, pero consideran que el relevo en la dirección del área sanitaria es «una esperanzadora oportunidad»

11 jul 2019 . Actualizado a las 05:01 h.

Los jefes dimitidos de los centros de salud de Vigo consideran que el cambio en la gerencia del área sanitaria es «una esperanzadora oportunidad de recuperación de un diálogo fundamental e inexcusable». En un comunicado que han hecho público este jueves, los jefes que dimitieron en marzo aseguran que mantienen sus reivindicaciones y también su «talante y actitud negociadora con seriedad, responsabilidad y lealtad». De hecho, en la habitual concentración de los jueves a mediodía, los médicos del área de Vigo han portado carteles que parecen dirigidos al gerente y dicen «Falamos...?». Al menos en una veintena de centros de salud se ha repetido la escena.

En Vigo ha habido dos huelgas en los últimos meses, una en mayo exclusiva para esta área y otra en junio, que fue la extensión de la anterior a toda Galicia. La primera estuvo impulsada por los jefes dimitidos y por la asamblea de médicos de Vigo y su primer punto reivindicativo era el relevo del anterior gerente.

El viernes pasado, el conselleiro de Sanidade ejecutó esa petición y trasladó a Félix Rubial a Ourense y recuperó para Vigo a Julio García Comesaña. El nuevo máximo dirigente de la sanidad viguesa se ha propuesto recuperar el diálogo con primaria y, aunque todavía no ha tenido ningún contacto con los dimisionarios, estos están abiertos al diálogo. De hecho, con este comunicado, los exjefes de los centros de salud y el comité de huelga marcan su voluntad de ser interlocutores en ese diálogo.

No es un asunto baladí. 25 jefes dimitieron en diciembre. El Sergas rechazó esas renuncias. En marzo volvieron a cesar 23 y el Sergas sí las aceptó. En ese momento, la organización sanitaria empezó a buscar a personas que quisieran asumir las jefaturas. No lanzó ningún concurso, pero sí designó a dedo a tres médicos para ocupar jefaturas, dos de ellos en plazas en las que antes había facultativos que dimitieron. Al mostrar esta apertura al diálogo, los antiguos jefes de los centros de salud también le están señalando al gerente que ese diálogo para solucionar problemas tiene que tenerlos a ellos (o a gente que los represente) como interlocutores.

Pero las reivindicaciones se mantienen. La principal es que haya diez minutos por consulta y paciente, algo a lo que el Sergas se ha negado repetidamente alegando que sería malo para los pacientes.

Imagen de la huelga de mayo
Imagen de la huelga de mayo Oscar Vázquez

Pero no es la única reivindicación. Quieren que se mejore el flujo de pacientes entre la primaria y el hospital «en condiciones dignas» y que la telemedicina no sea la única vía de derivación. También reclaman más acceso a pruebas, más médicos para solucionar el déficit actual y el que se producirá con las jubilaciones, e inversiones en material para los centros de salud.

Además, los dimisionarios seguirán participando de la Asamblea de Áreas Sanitarias (AAS) de Galicia, que es la que impulsó la última convocatoria de huelga al margen de los sindicatos. Se mantienen las reclamaciones también en el plano deontológico, desde el que se considera que la sobrecarga afecta al buen desarrollo del trabajo con los pacientes.

El Sergas no ha hecho ninguna valoración sobre la posición de los dimisionarios. El nuevo gerente ya se ha reunido con profesionales en los ambulatorios de Rosalía de Castro, López Mora, Cangas y Ponteareas. Los jefes de estos centros no dimitieron de sus cargos. Según un portavoz del Sergas, en estos tres primeros días Comesaña ha analizado el plan de necesidades y equipamientos de los centros de salud en lo que tiene que ver con el área de Vigo, así como la situación de los ambulatorios en construcción, que son Gondomar, Salceda y Pazos de Borbén, y el proyecto de Bouzas.