El colegio médico pide estabilidad y más autogestión en la sanidad pública ourensana

m. v. OURENSE / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Agostiño Iglesias

Los facultativos valoran la carrera del nuevo gerente del Sergas, pero ven demasiados cambios en poco tiempo

07 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El área sanitaria de Ourense afronta un nuevo cambio en su gerencia apenas dieciséis meses después de haber vivido el último. Este viernes se hacía oficial el nombramiento de Félix Rubial como máximo responsable de la sanidad pública en la provincia, en un movimiento que ha supuesto el traslado del hasta ahora gerente ourensano, Julio Comesaña, a Vigo.

Y lo que desde muchos sectores se ha calificado como un cambio de cromos, supone para el colegio de médicos de Ourense, cuyos profesionales no han sido ajenos en los últimos meses a las acciones reivindicativas contra las carencias en la sanidad pública, una novedad que, a fin de cuentas, podría no suponer un cambio significativo. «La situación de desgaste de Felix Rubial en Vigo llevaba a que más temprano que tarde tuvieran que hacer un relevo en esta zona», asegura José Luis Jiménez, presidente del colegio. «Desde nuestro punto de vista, en este momento los cambios de gerencia no tienen una relevancia importante porque los problemas de la sanidad pública son suficientemente profundos y multifactoriales como para que la influencia no sea grande», opina Jiménez, que considera que «las cosas están bastante cerradas e incluso podemos entender que en los últimos años ha aumentado el centralismo en las decisiones del Sergas».

En su opinión, la continuidad va a ser la línea de trabajo que va a marcar los próximos meses en Ourense, «porque hay una serie de cosas en marcha en el área de EOXI, como el plan director y las nuevas propuestas, con cuestiones como la estrategia de crónicos, y creo que todo eso tendrá continuidad». Sobre el nuevo gerente, en todo caso, avanza que no hay prejuicios, sino todo lo contrario. «Creo que es uno de los mayores conocedores ahora mismo del sistema sanitario público gallego. Lleva una trayectoria larguísima en gestión, así que conocimiento no le falta y no tenemos porqué tener prejuicios, lo que pasó en Vigo era un problema de concepto y organización del sistema sanitario en Galicia». Insiste en que «por nuestra parte, habrá toda la colaboración necesaria para que las particularidades de Ourense, como el envejecimiento de la población, puedan ser abordados» y desearía que el nuevo responsable sanitario «tuviera la capacidad de autogestión suficiente». Adelanta que, en cuanto sea posible, Rubial recibirá el diagnóstico del colectivo sobre la provincia de Ourense, y deja claro que «estamos dispuestos a colaborar, y también a hacer críticas».

Desearía, en todo caso, que la estancia del nuevo gerente sea más duradera que la de los últimos, porque cree que tantos cambios en pocos años no benefician al funcionamiento de la sanidad. «Llevamos cuatro gerentes en cuatro años y es mucho, y malo. Se pierde tiempo volviendo a empezar de cero, siempre hay que retomar el trabajo y eso cuesta tiempo, así que queremos reivindicar continuidad; no podemos ser el comodín en los cambios de cromos. Eso es algo sobre lo que desde Ourense debemos protestar», zanja.

El nombramiento de Rubial para la gerencia del Sergas suscitó numerosas reacciones, muchas de ellas negativas, desde distintos colectivos. Gonzalo Caballero, líder de los socialistas gallegos, aseguró que los cambios evidencian n que Feijóo «é incapaz de xestionar a sanidade pública». Tildó de «maltrato» hacia Ourense la decisión de situar al frente de su sanidad pública «ao xerente co récord de manifestantes» y se preguntó «que lle fixo Ourense a Feijóo para recibir tanto castigo», advirtiendo que «non pode ser presidente da Xunta quen castiga sistematicamente á terceira cidade de Galicia e a unha provincia enteira».

La parlamentaria Eva Solla aseguró, por su parte, que «a consellería debe dar explicacións ante o traslado do xerente imputado» y criticó la gestión de Ruibal en la ciudad olívica.

«Una boa noticia» para la asociación galega en defensa de la sanidad, que solo se fija en Vigo

El traslado a Ourense desde Vigo de Félix Ruibal fue celebrado por la Asociación Galega para a Defensa da Sanidade Pública, si bien la entidad solo se fija en la repercusión que supone para el área sanitaria de Vigo el cese de su hasta ahora gerente, sin mención alguna a Ourense. «Consideramos que se trata dunha boa noticia para a sanidade pública e a cidadanía da área sanitaria de Vigo», explicaron desde la entidad gallega, que estima que «este cese debería terse realizado hai moito tempo, tendo en conta o triste e desafortunado papel desenvolvido na construción, posta en funcionamento e xestión do hospital Álvaro Cunqueiro». Este organismo atribuyó a Rubial el haber incrementado los problemas en atención primaria, «á que someteu a recortes de recursos», si bien lo calificó como un «mero executor» de las políticas sanitarias marcadas desde la Xunta.

CIG-Saúde, por su parte, aseguró a través de un comunicado que «non vai a conlevar ningún cambio nas políticas sanitarias da EOXI de Ourense, Verín e O Barco de Valdeorras, tanto a nivel de atención primaria como de hospitalaria». Entienden, además, que «a problemática da nosa provincia en materia sanitaria non se vai arranxar con un simple cambio de xerentes».