El abogado que retó a una jueza de Vigo a estar en tres ciudades a la vez rectifica y retrasa los casos
VIGO CIUDAD
El letrado madrileño Juan Gonzalo Ospina, que denunció ante el Colegio de Abogados de Vigo que una jueza de esta ciudad le denegó «arbitrariamente» el aplazamiento de unas declaraciones, compareció ayer en el tribunal gallego y logró retrasar el interrogatorio de tres clientes para otro día. Alegó que necesitaba más tiempo para preparar el caso. Representa a tres directivos de una cadena de peluquerías y estética de A Coruña y Vigo investigados por delito fiscal. Supuestamente, elaboraron facturas falsas con proveedores de países de la UE, gastos que Hacienda no contabilizó.
La polémica surgió hace una semana porque el letrado pidió a la magistrada del Juzgado de Instrucción número 3 de Vigo que aplazase la toma de declaraciones de los peluqueros porque, justo a la misma hora, tenía que representar en Ávila a un investigado por agresión sexual y quince minutos después en Alcobendas, en Madrid, a un conductor por delitos de atentado y contra la seguridad vial. La jueza se negó a suspender la vista tirando de retranca: si el letrado podía estar a la vez en Ávila y Alcobendas gozaba del «don de la ubicuidad» y, por eso, también podía ir a Vigo.
El jurista se lo tomó como una «falta de respeto» a la abogacía y calentó las redes sociales y las televisiones diciendo que la «Justicia no es una charcutería». Al final, logró una carambola triple: le suspendieron la cita de Ávila, envió a un compañero a Alcobendas y viajó él mismo a Vigo para evitar que lo expedientasen por obstrucción.