65.000 vigueses rechazan participar en el plan de detección precoz del cáncer de colon

VIGO CIUDAD

CEDIDA

En año y medio se han diagnosticado 77 tumores y 271 casos con alto riesgo de desarrollarlo; para participar solo hay que llevar una muestra de heces al centro de salud

16 abr 2019 . Actualizado a las 09:15 h.

El programa de detección precoz del cáncer de colon avanza. Los gallegos de entre 50 y 69 reciben una invitación a participar en el programa de cribado, para descartar que padezcan un tumor digestivo. En el área de Vigo, las cartas empezaron a enviarse en julio del 2017 a la población asignada a algunos centros de salud. Desde entonces, ha ido desplegándose al resto del territorio y, según el Servizo Galego de Saúde, el próximo junio habrá llegado a toda la población de esas edades.

Hasta el mes de diciembre habían recibido la invitación a participar 98.590 personas de Vigo y todo el sur de la provincia. Solo 33.970 acabaron entregando la muestra para el test de sangre oculta en heces. Dicho de otra manera, 64.620 declinaron participar en la prueba (gratuita) con la que se puede descartar un cáncer de colon. Dos de cada tres ciudadanos a los que se dirige el programa lo rechazan. «No podemos estar satisfechos», reconoce el jefe del servicio de aparato digestivo del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi), Ignacio Rodríguez Prada. La estimación sobre la que se diseñó el programa pasaba por que, al principio, participasen el 48 % de los candidatos, como ocurrió en Ferrol cuando en el 2013 nació este plan, de forma piloto. Prada cree que llegar al 50 % sería lo mínimo para empezar.

El jefe de servicio no se explica por qué la gente prefiere no seguir el plan. «El programa se dirige a gente sana, así que no se sienten con riesgo; como no tienen síntomas, creen que están sanos», cree. También cree que hay diferencia si el médico de cabecera recomienda activamente a su paciente que se haga la prueba. Prada dice que hay gente que no entrega la muestra por miedo a tener un diagnóstico positivo.

La aceptación es mayor entre las mujeres, aunque solo ligeramente. El 36,3 % de las ciudadanas a las que les llega la invitación a participar en el programa de cribado entregan la muestra, frente al 32,4 % de los hombres. El grupo de tumores colorrectales es el que tiene más incidencia en España sumando los dos sexos (es el segundo en cada uno de ellos por separado) según datos de la Asociación Española contra el Cáncer. En solo un año se detectaron 37.172 en todo el país. «A maior parte destes cancros diagnostícanse cando xa están avanzados o que diminúe a supervivencia dos pacientes», explica el Sergas.

«Menos del 40 % de los cánceres que nos llegan a la consulta por síntomas y no por el programa de detección precoz están en estadios curables; aquí son el 90 %», ilustra Prada. 

El programa de detección precoz sirve, precisamente, para evitar eso. El 70 % de los cánceres que se diagnostican dentro de este plan están en estados iniciales, lo cual permite hacer un tratamiento menos agresivo. Cuando el paciente recibe la carta en su casa, puede aceptar entrar en el programa o no. Si acepta, se le manda un kit para tomar la muestra de heces y llevarla al centro de salud (hay 4.200 personas que recibieron el kit y no lo llevaron). Después se hacen los análisis.

Cuando aparece sangre oculta en heces, se deriva al paciente al hospital para hacer una colonoscopia. La presencia de sangre no es definitiva, la colonoscopia es la técnica que permite diagnosticar el tumor. En el caso de Vigo, siempre según los datos facilitados por el Sergas que van hasta diciembre del 2018, casi el 7 % de las muestras revelaron sangre y se hicieron ya 2.051 colonoscopias (aunque el programa empezó en julio del 2017, las endoscopias digestivas empezaron a practicarse en septiembre).

De ellas, se encontraron 77 cánceres invasivos, 271 casos con alto riesgo de desarrollar un tumor colorrectal y 362 con un riesgo intermedio. En estos casos, se extirpan los adenomas para reducir el riesgo de cáncer. La incidencia es tres veces superior entre los hombres que participaron en el programa (5,4 casos por cada mil habitantes) que entre las mujeres (1,6). Con esas cifras se puede deducir que si hubiesen participado el 100 % de las personas a las que invitó el programa, se habrían diagnosticado 154 tumores más, 542 casos más de alto riesgo de cáncer y 724 de riesgo intermedio. El jefe de servicio avala el cálculo.