Vigo rebaja la espera de la risga, pero aún es el triple que la de Santiago

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Jacobo Philippot

Un total de 2.400 personas reciben la renta, mientras que el pasado año la solicitaron más de un millar

29 mar 2019 . Actualizado a las 20:01 h.

El tiempo de espera de un vigués por la tramitación de la risga ha bajado un poco en el último año al pasar de 190 días a 157 en el 2018. Sin embargo, no solo sigue siendo el más elevado de las ciudades gallegas, sino que triplica al de Santiago, donde los ciudadanos solo tienen que esperar 51 días. Mucho más alejado está de Pontevedra, con una media de espera de solo 22 días. En A Coruña la gestión tarda casi la mitad que en Vigo (85 días), seguida de Ourense (67), Lugo (57) y Ferrol (53). Excepto A Coruña y Ferrol, que aumentan sensiblemente con relación al año anterior, en el resto de las ciudades desciende la demora.

La Xunta achaca la diferencia de Vigo con el resto de los grandes municipios a la deficiente gestión de los trámites previos que corren a cargo de los servicios sociales del Concello y que son obligatorios para pasar a la Consellería de Política Social. En el Concello, por su parte, alegan que en ello tiene mucho que ver la cantidad de peticiones que hay que gestionar.

Tampoco sigue Vigo la tendencia general de Galicia, donde las solicitudes de la risga caen un 4 % hasta quedarse en 5.800, frente al récord alcanzado en el 2013, de 7.700. Desde la Xunta interpretan los datos como la consecuencia de la mejora económica. Por el contrario, en la ciudad los solicitantes siguen aumentando y pasan en un año de 993 a 1.012, lo que la sitúa de nuevo a cierta distancia de la más próxima, A Coruña, con 804.

Colectivos sociales de Vigo como Os Ninguéns, la Red de Solidaridad Popular, la Red Social Galicia Sur y la PAH (Plataforma Antidesahucios) han solicitado en reiteradas ocasiones el incremento de la plantilla de trabajadores sociales que, a su juicio, sigue siendo insuficiente.

Alegan que las personas que solicitan este tipo de ayudas suelen encontrarse en situaciones extremas, como impagos de alquileres de viviendas, desahucios o, simplemente, falta de medios para alimentarse o vestir a los hijos. En más de un centro de enseñanza han sido testigos de la deficiente alimentación de los niños.

En la actualidad hay 2.427 personas beneficiarias de la renta de integración social en Vigo, el doble que en A Coruña, lo que indica las necesidades que todavía tienen muchas personas, pese la mejoría económica. Buena parte de los solicitantes son familias monoparentales, habitualmente integradas por mujeres, que viven solas con sus hijos y que carecen de ingresos para sacarlos adelante.

Cerca de tres mil vigueses llegaron a cobrar la risga en el 2016, la mayor cifra de los últimos ocho años. El problema más grave a la hora de cobrar son los errores en la tramitación, lo que echa para atrás las solicitudes y retrasa la percepción de la ayuda. Esta varía mucho en función de situaciones del solicitante y de complementos como el correspondiente al pago de un alquiler o si tienen hijos a su cargo. La cuantía media en la comunidad gallega es de 450 euros y en total, la inversión en Vigo de la risga fue el pasado año se 12,4 millones de euros.

En el conjunto de Galicia la perciben 10.371 personas y el tiempo medio que se tarda en gestionarla es de 72 días.

Las familias que perciben la renta tienen la obligación de comunicar los cambios económicos que tienen lugar en el hogar, como la percepción de un salario, lo que obliga a revisar la situación. De ho hacerlo así, como ya ha sucedido en algún caso, se exponen a su retirada provisional hasta que se aclaren las circunstancias.