Suspenderá descansos de forma indefinida para completar los turnos del servicio
25 feb 2019 . Actualizado a las 12:51 h.El conflicto entre el Ayuntamiento de Vigo y el cuerpo de bomberos sigue agrandándose a medida que pasan las semanas por la falta de soluciones para revertir la falta de efectivos, que llegó a implicar el cierre temporal del parque de Balaídos por la carencia de profesionales. El último movimiento del Concello significa un órdago para los profesionales de este servicio de emergencias municipal, que todavía intentan asimilar la «imposición» de la concejalía de Seguridad Ciudadana, con Carlos López Font al frente. «Se trata de un decreto que nos impone trabajar sí o sí, incluso olvidando nuestros turnos de libranza para garantizar el servicio», explica el delegado de la CIG, Miguel Ucles.
El decreto municipal, firmado el día 6, es muy claro en su contenido: «Aos efectos de atender calquera circunstancias extraordinarias da incumbencia do servizo debidamente apreciadas polo xefe do corpo (alertas meteorolóxicas, eventos públicos ou campañas de prevención) autorízase ao citado funcionario a suspensión de descansos do persoal de cadro ata completar a dotación adicional que resulte indispensable a tal efecto».
El decreto detalla que las situaciones vividas desde el pasado noviembre, con falta de efectivos que no permitían completar los turnos obligatorios, no pueden repetirse y resulta obligatorio aplicar el acuerdo alcanzado por el gobierno local el 10 de mayo del 2010. Dicha conformidad incluye la presencia de tres mandos, once bomberos, cinco conductores y otro bomberos para atender la central de comunicaciones. Es decir, en cada turno, repartidos entre los parques de Teis y Balaídos, tienen que figurar 20 profesionales. Desde noviembre, esos turnos, en numerosas ocasiones, no llegaban a 15, situación que fue denunciada reiteradamente por la plantilla sin que el Concello hiciese nada hasta que la situación tocó fondo con el cierre del parque de Balaídos por la imposibilidad de reunir a los profesionales mínimos.
El decreto municipal que obliga a los bomberos a trabajar aunque pierdan sus libranzas también incluye la aportación del jefe de área de seguridad y movilidad, Antonio Vivero, que, también figuró en la lista de integrantes del jurado que evaluó la última oposición del cuerpo de bomberos, aún hoy estancada y con muchas posibilidades de acabar en un proceso judicial por las quejas de un parte importante de los opositores. El mismo decreto deja claro que es el propio cuerpo de bomberos el responsable de la carencia de personal, achacándoselo a los «traballadores que non veñen prestando as xornadas extraordinarias establecidas en virtude do decreto (del 2010) impedindo o cumprimento dos servizos mínimos».
La respuesta de los bomberos se dará a conocer en pocos días, aunque ya adelantan que existen serias dudas en el colectivo de que el citado decreto sea legal al no garantizar su descanso, por lo que se barajan ponerlo en manos de la Justicia para que decida.
El nuevo decreto es indefinido hasta la ejecución de las ofertas de empleo del 2017 al 2019
Bajan revueltas las aguas en el seno de la plantilla de bomberos de Vigo. El motivo es el enfrentamiento con el Concello, al que acusan de desoír durante meses sus quejas sobre la falta de personal y la precariedad del servicio público que implica. Los mismos profesionales llevan tiempo denunciando también la falta de diálogo con el Concello, al que acusan de meter en un cajón sus quejas. «Por eso, ahora, que salgan con este decreto que implica la pérdida de nuestras libranzas para garantizar los turnos, nos parece una broma de mal gusto. ¿Acaso tenemos que pagar nosotros y nuestras familias las carencias manifiestas sobre la gestión del cuerpo de bomberos?», se pregunta el delegado de la CIG, Miguel Ucles, que junto al resto del comité de personal del Concello, ya tuvieron una reunión para analizar la imposición del Concello. Otra cuestión que genera intranquilidad entre los bomberos es el tiempo indefinido que implica el decreto. El mismo documento lo explica de forma gráfica: «Fíase á execución ás ofertas de emprego público correspondentes aos exercicios 2017, 2018 e 2019, no segundo semestre deste ano. Dito recurso organizativo resulta indispensable para garantir a pronta e eficaz atención de calquera emerxencias e demais situacións de risco que poidan presentarse». La frase recogida en el decreto oficial no hace más aumentar el malestar entre los profesionales del cuerpo de bomberos, que tras meses de reivindicaciones infructuosas para contar con más efectivo, ahora sí ven recogido en un documento oficial el sentir de sus reclamaciones.