Una las las evacuadas en el hotel de Vigo: «Bajé desde el piso 16, fue angustioso»

Alrededor de 150 huéspedes e inquilinos fueron desalojados pasada la medianoche de ayer del hotel Bahía de Vigo, de 17 plantas, por un incendio en un almacén en la entreplanta. Todo apunta a un cortorcircuito. Fueron movilizados los dos parques de bomberos de Vigo, un total de 18 hombres, para sofocar el incendio en un cuarto repleto de muebles, electrodomésticos, lámparas y ropa, al que se accedía por un estrecho pasillo obstaculizado por carritos. El efecto chimenea anegó de humo las plantas altas y obligó a decenas de turistas en pijama y zapatillas a bajar por las escaleras protegidos con toallas y sábanas mojadas. Dos mujeres con movilidad reducida fueron evacuadas por los bomberos en volandas. La mayoría de los clientes fueron realojados en los hoteles Ciudad de Vigo, Axis y AC, y veinte regresaron a sus cuartos a las 4.00 horas.

Carmen, una turista, viajó con su hermana y amigas a Vigo. A las 0.45 horas, fue una de las primeras en descubrir el incendio porque bajó al vestíbulo en pijama a pedir una tila. «No me podía dormir y al coger el ascensor había un olor rarillo a humo y se lo dije al ascensorista, que ya había llamado a los bomberos». Pidió subir a avisar a sus allegados pero no le dejaron. Se quedó en zapatillas y bata: «Lo viví en vivo y en directo, fui la primera».

Camila y Brais son dos jóvenes que pasaban la noche en una habitación del piso 16. Les alarmó el ruido de sirenas. «Abrimos la puerta del pasillo, había mucho humo ya, nos asustamos, salían vecinos gritando y decidimos correr escaleras abajo», afirma Camila. «Mojamos las toallas y las pusimos debajo de la puerta. Hablamos con los vecinos y bajamos porque no se veía fuego. Fue bastante angustiosa la bajada hasta el séptimo, donde se respiraba mejor», dice Brais.

Su compañera vivió momentos dramáticos: «Al bajar no se respiraba. Era horrible, bajaba gente mayor a otro ritmo». «El humo era una pasada, no se veía nada ni se respiraba», cuenta Brais. Por el camino coincidieron con los bomberos subiendo para desalojar. «Fue decisión nuestra. Estábamos en el piso 16, temíamos que el fuego subiese arriba», añade. Pasaron la noche en casa de los padres de ella y, al amanecer, volvieron a devolver las sábanas mojadas antes de ir a trabajar.

En el hotel también estaba una excusión de 54 turistas del Inserso procedentes de Barcelona. «Nos llamaron por teléfono para que pusiéramos toallas. Encendimos la luz y vimos la habitación llena de humo. Abrimos la ventana y nos asomamos a respirar», dice Juan, alojado con su esposa en la planta novena. Su mujer, Isabel, cuenta: «Él tosía mucho, le dije que se tomase un caramelito y luego yo tosí. Era muy raro y empecé a llorar del humo». Permanecieron en la habitación porque «no había peligro ni miedo», pero sin agua a causa de la rotura de unas tuberías.

Algunos excursionistas fueron realojados en el hotel Ciudad de Vigo y regresaron al Bahía a ducharse. Luego, siguieron ruta a Pontevedra a celebrar San Valentín y que estaban todos bien. «Esa noche estábamos fritos como palomos por el cansancio del viaje», cuenta María Dolores, en bata, pijama y zapatillas. Un compañero añade: «Oímos golpes en los pasillos, pensábamos que era una broma, con gritos de ‘‘Policía, abra la puerta’’. Nos explicaron que había un incendio, que cogiésemos lo imprescindible y nos bajaron al vestíbulo». «El trato ha sido excepcional, ha sido fabuloso, una maravilla», dice Dolores. «Pasamos miedo, se me quedó dentro el humo», relata otra huésped, ya recuperada.

La Policía Científica de la comisaría examinó ayer la escena.

«La gente reaccionó sorprendentemente bien, con calma y tranquilidad»

La nueva directora del Hotel Bahía, Ana María Esperón, pasó una noche en vela supervisando las tareas de extinción y el realojo de clientes.

-¿Cuánta gente había?

-Teníamos 146 personas, algunos viven aquí de alquiler, y se realojaron más de 90 en tres hoteles. Un grupo del Inserso ocupó el Ciudad de Vigo, algunos ya volvieron y otros siguen allí.

-¿Hubo escenas de pánico?

-Había humo y quizás nerviosismo cuando la gente bajaba por las escaleras hasta llegar al hall, pero la evacuación fue bastante tranquila y bien organizada, los bomberos actuaron muy rápido y no hubo problema. La gente reaccionó sorprendentemente bien, con calma, con tranquilidad.

-¿Usted pasó la noche aquí?

-Y el equipo que me acompañaba, no estaba yo sola.

-¿Cuál fue la causa del fuego?

-Un punto de luz, creemos que se inició ahí, pero aún no se sabe.

-¿Hubo una intoxicada?

-Algo leve, fue atendida aquí.

-¿Dónde ocurrió el incendio?

-Es un pequeño recinto con mobiliario cerca de otros almacenes. En la entreplanta, es una zona interna para uso de la plantilla, no se atiende a la clientela y no hay salones ni nada.

-¿Cuánto tardó en solucionarse?

-Sobre dos horas, lo que llevó apagar y ventilar los cuartos.

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