Fallece Luis Carballo, creador de «La arruga es bella» y el Pelegrín

VIGO CIUDAD

El diseñador Luis Carballo, con el Pelegrin en una imagen de archivo
El diseñador Luis Carballo, con el Pelegrin en una imagen de archivo Kopa

El publicista impulsó desde Vigo la imagen del textil gallego a mediados de los 80

10 feb 2019 . Actualizado a las 07:12 h.

Fue uno de los personajes que contribuyeron a difundir un aura vanguardista de Galicia y como tal se le recordará. El publicista Luis Carballo Tabaoda (Xinzo de Limia, 1938 ) ha fallecido en Vigo a los 80 años. El gran impulsor de la imagen de la moda gallega en los años 80, creó el famoso eslogan «La arruga es bella» para Adolfo Domínguez y a comienzos de los 90 el Pelegrín del Xacobeo.

Carballo, que comenzó a trabajar a los 18 años en el Banco Pastor, fue el gran artífice de que la moda de Galicia triunfase en España y a nivel internacional. Fundó su agencia de publicidad en el año 1959 y desde ella se convirtió en un gran creador de conceptos e ideas. Visionario e innovador, construyó la identidad de muchas empresas y fue el padre de uno de los lemas más recordados de la publicidad nacional. Con él ayudó a encumbrar a Adolfo Domínguez, que supo ver al aliado necesario para conquistar las pasarelas. El modisto señaló tras conocer el fallecimiento de su antiguo colaborador que ambos fueron «jóvenes y felices» e incluso esquiaron juntos en Manzaneda. Domínguez siempre ha defendido que «La arruga es bella» fue una invención suya.

Luis Carballo y su mujer y brazo ejecutivo, Julia Taboada, consolidaron una empresa que realizó grandes campañas de márketing e imagen para firmas como el Banco Pastor, Pescanova, Coren o Mondariz. Para Adolfo Dominguez desarrolló grandes acciones de mercadotecnia y logró posicionar la marca en lo más alto del panorama.

Pero sus trabajos en el campo de la moda se extendieron mucho más allá, creando una imagen común aglutinando a los grandes diseñadores gallegos de los años 80 y posteriores como Gene Cabaleiro, María Moreira, Florentino o Kina Fernández, entre otros. Fue en el año 1985 cuando el creativo ourensano se estableció en un efervescente Vigo, con un local en la Gran Vía, y contribuyó á que la ciudad se consagrase como un icono de la modernidad, cuando la movida se desplazaba a caballo entre Madrid y la ría, y en las discotecas de moda de ambas conurbaciones lucían las grandes hombreras de los trajes de la moda gallega. Entonces, la revista Galicia Moda que dirigía llegó a difundir 30.000 ejemplares, mostrando un escaparate de jóvenes talentos del diseño y la costura.

En el año 1992, España y Galicia vivían un bum económico y político y Luis Carballo posicionó a Galicia en la exposición universal de Sevilla con un proyecto de contenidos y de productos en los que los nuevos chef ofrecían sus innovadoras recetas en el pabellón gallego. El éxito de ese recinto en Sevilla sirvió para darle un notable impulso al Xacobeo 93. La mascota Pelegrín, con aires mironianos, fue su aportación para popularizar un rico camino de cultura y tradición a Santiago.

La muerte de su mujer en el 2013 fue un duro golpe. Siempre inquieto, sus últimos años los pasó enfermo pero dando rienda suelta a sus grandes aficiones, como la escritura y la fotografía, e indagando en los nuevos movimientos sociales y económicos.

La sala 8 del tanatorio de Emorvisa, en Pereiró, acoge los restos de Luis Carballo, que será despedido el domingo a las 12.30 horas con un oficio religioso.