Los expertos ven posible reconstruir la fachada de la vieja estación de tren

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

Las piedras deterioradas o que han sido sustraídas pueden sustituirse por otras

07 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El mal estado de las piedras de la antigua fachada de la antigua estación de tren de Vigo no sería un obstáculo para su reconstrucción. Arquitectos consultados por este periódico lo ven posible con la sustitución de aquellas piezas que estén deterioradas o hayan desaparecido. La especialista en Patrimonio Industrial Iria Sobrino cree, no obstante, que debería de ser montada en el mismo lugar donde permaneció siempre porque, de lo contrario, «sería contar una mentira». «El lugar que ocupaba, la huella, es más importante que la propia piedra», señala esta especialista. Por eso cree que sería incorrecto buscar otro espacio para la fachada. «Si no se va a poner donde estaba, es mejor no hacerlo, porque cuando llegue un niño para entender e imaginarse cómo llegaban los trenes, le estaremos contando algo que no es verdad», afirma. Cree que antes de cambiar la fachada de sitio sería mejor aprovechar los materiales para hacer otra obra.

Iria Sobrino considera que el patrimonio no es un adorno y no se puede colocar en otro lado como si fuera un florero. «A veces no por ponerlo en otro sitio le haces un favor. Puede ser que lo estés humillando, como sucedió con el barco de Alfageme, que fue situado fuera de su contexto», señala.

Esta arquitecta fue testigo de cómo se desmontó la antigua estación y recuerda que fue una labor que se hizo con mucho cuidado. «Siempre me cuesta creer que cuando se desmonta una cosa se vuelve a poner. Es como cuando llevas las cosas al trastero a ver si se olvidan. Eso ha pasado con mucho de nuestro patrimonio. Pero más peligroso de que se olvide es contar una mentira y ponerlo en otro lado», afirma.

El arquitecto experto en Patrimonio Jaime Garrido destaca el interesante valor histórico de la antigua estación de tren, por encima del arquitectónico. «Fue el primer edificio que comunicó Vigo con Ourense. Vigo era el mar de la provincia de Ourense y las carreteras eran muy malas. El ferrocarril supuso una gran innovación. La gente de Ourense buscaba el mar y también benefició a toda la industria pesquera», afirma. El frontispicio tenía entrelazadas las letras V y O.

Precisamente este especialista fue quien elaboró un informe para incoar el expediente de declaración de bien de interes cultural, junto con el edificio del antiguo palacio de justicia de la calle Príncipe, una iniciativa que durmió años en un cajón porque el entonces alcalde Manoel Soto no le interesaba en su afán de hacer plazas públicas. El gobierno de Fraga tramitó la incoación del expediente. «Soto no pudo tocar nada y echó pestes contra la Xunta», recuerda. No obstante, el inmueble no llegó a ser declarado BIC.

Positivo

Garrido ve positiva la recuperación de la fachada y le da igual el sitio donde se ponga. «La arquitectura es algo más que fachadas, pero podrían reconstruirla como un pequeño recuerdo, nunca una rehabilitación. Dónde, no lo sé, eso lo tendrían que decir los técnicos», afirma.

La fachada de la antigua estación de tren de Urzaiz que el alcalde quiere recuerar lleva 18 años desmontada y abandonada en una explanada de la antigua estación de Redondela. El conjunto se parece en la actualidad más a una escombrera que a un bien patrimonial. El inmueble fue desmontado minuciosamente cuando se construyó la estación de Urzaiz. Era una solución provisional hasta decir qué se hacía con el inmueble. Durante todo este tiempo ha permanecido sin ningún tipo de vigilancia y han desaparecido piedras.