Concellos del entorno rentabilizan la falta de áreas para caravanas en Vigo

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

Once municipios de la zona acaparan la mitad de los estacionamientos de la provincia

23 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La provincia de Pontevedra es con la de Ourense la más deficitaria en áreas de estacionamiento para autocaravanas, un medio de transporte y de vida que no para de ganar adeptos. De las 27 áreas existentes en la provincia, doce se encuentran en once municipios del área metropolitana. Se trata de Cangas (2), Redondela, Tui, A Guarda, Oia, Soutomaior, Mos, Mondariz, Salceda, As Neves y Arbo. De todos ellos, Cangas es el único que cuenta con dos áreas, una pública, y otra privada en el cámping-car playa Arneles.

Curiosamente, Vigo no dispone de un espacio destinado a este tipo de vehículos de forma específica, pese a ser la ciudad más poblada de Galicia y al tirón turístico. Es la única de las siete grandes ciudades gallegas que no cuenta con el servicio. Esta circunstancia ha sido aprovechada por los municipios del entorno para ganar un turismo que cotiza al alza.

De las doce áreas de autocaravanas existentes en el área metropolitana, ocho son de carácter público y cuatro privado, aunque de diferentes ámbitos. Las de A Guarda y Mos son de las llamadas en ruta. Se trata habitualmente de espacios habilitados en las inmediaciones de gasolineras. La de Oia, por el contrario, está situada en el cámping O Muíño.

El resto de servicios de la provincia están situados en Pontevedra capital, Agolada (2), Bueu, Dena, Forcarei, Lalín, Poio, Ponte Caldelas, Sanxenxo (2) Vila de Cruces (2) y Vilagarcía de Arousa (2).

A nivel provincial, Pontevedra ocupa el penúltimo lugar, con 22 áreas, solo por delante de Ourense, que dispone de 21. Un dato sorprendente si se tiene en cuenta que las Rías Baixas es una de las zonas más turísticas de Galicia. En el polo opuesto están las provincias de A Coruña, con 42, y Lugo con 35.

«Es evidente que este tipo de vehículos se han extendido mucho. Cada pocos metros hay un área en Galicia. Eso ocurre porque hay una asociación potente, tenemos muchos socios y hacemos fuerza. Los ayuntamientos ven que es interesante y nos llaman para consultar. Estamos entrevistándonos con los alcaldes para tratar de conseguir más. Tenemos pendiente de estrenar una en Vivero y el próximo mes se pondrá en marcha otra en Betanzos», comenta Sindo López, tesorero de la entidad que agrupa a casi 700 socios.

Los concellos de pequeño y mediano tamaño consideran este tipo de turismo un buen aporte de ingresos para el comercio y la hostelería local. Lejos de suponer competencia alguna, en la mayoría de las ocasiones sirve para complementar la oferta de habitación.

«Sería conveniente que tuvieran todas las ciudades. La primera de Lugo está a diez minutos andando del centro y la de Pontevedra también», indica López.

Al margen de los sitios oficiales, existen otras zonas en las que se permite estacionar por un tiempo limitado, aunque no extender otros objetos como el mobiliario de cámping. Otra opción es aparcar en espacios libres con el riesgo de exponerse a una multa. Es lo que sucede a veces en las inmediaciones de playas, como es el caso de Samil y de O Vao.

«Solo se necesita un sitio para vaciar las aguas grises y negras y un grifo para coger agua»

En opinión de Sindo López, disponer un área para autocaravanas requiere, más que nada, voluntad. «Solo se necesita un sitio para vaciar las aguas grises y negras y un grifo para coger agua. Para luz no hace falta, son autónomos, con placas solares u otros sistemas», explica.

Los precios de los vehículos pueden oscilar entere los 50.000 y 300.000 euros, dependiendo del espacio y servicios. Para los que no quieran rascarse tanto el bolsillo existe un mercado de segunda mano con precios de todo tipo. El coste del aparcamiento en zonas privadas puede oscilar entre los 10 y 15 euros diarios. En algunas áreas en ruta, situadas en gasolineras, permiten estancia gratis a cambio de consumir combustible.