¿Asesinado a golpes por llevar demasiado dinero encima?

E.V.Pita VIGO

VIGO CIUDAD

Manuel, hijo del fallecido, a la izquierda, con Noli, el vecino que encontró el cadáver
Manuel, hijo del fallecido, a la izquierda, con Noli, el vecino que encontró el cadáver Doniz

Los investigadores pasaron la tarde de ayer haciendo registros en la vivienda

14 ene 2019 . Actualizado a las 11:04 h.

Todo apunta a que el vecino de 81 años que apareció muerto con signos de violencia en Sárdoma fue agredido con «golpes muy violentos» y con «bastante contundencia». El escenario del homicidio podría ser la propia casa durante un robo. El móvil económico es una de las principales hipótesis pero hay más líneas de investigación.

La autorización de la licencia de enterramiento se ha retrasado debido a que la autopsia, que prácticamente ha terminado, requiere de unas pruebas pendientes de  examinar. El informe es clave para saber la fecha exacta de la muerte, lo que despejaría muchas dudas sobre las distintas versiones que circulan de caso.

La Policía ha empleado hasta dos equipos de investigadores distintos para rastrear el campo donde apareció tendida la víctima con el fin de peinar todos los rastros posibles.

La comisaría de Vigo ha volcado casi en exclusiva a todos sus efectivos de Policía Científica y el grupo de Policía Judicial en la investigación del crimen de Sárdoma. Hace 36 horas que fue hallado el cadáver de Manuel Alonso Rivas, vecino de Sárdoma de 81 años, tirado en un descampado cerca de su casa y envuelto en un plástico y con una bolsa en la cabeza. Todo apunta a que murió de golpes en la cabeza. 

Familiares de la víctima han acudido esta mañana al Juzgado de Instrucción Número 8 de Vigo, que investiga el caso, para hacer las gestiones para enterrar a su allegado una vez que los forenses terminaron la autopsia en el Hospital Nicolás Peña. Consternados por el crimen, prefirieron no hacer declaraciones a la prensa.

Los investigadores recogieron ayer pruebas durante un registro en la casa de la víctima que tuvo lugar por la tarde, para aclarar si fue el escenario del crimen. Numerosos vecinos fueron a declarar como testigos durante la tarde a la comisaría. La Policía intentaba localizar a un vagabundo de la zona para ver si podía aportar algún dato.

También buscan el arma homicida. La hipótesis principal fue que la víctima fue atracada porque solía llevar mucho dinero encima. Un testigo dice haberlo visto por última vez el 2 de enero, tres días antes de notarse su ausencia. Al parecer, el criminal no pudo llevarse el cadáver del lugar o bien porque no tenía coche o porque algo le hizo escapar del sitio y no pudo enterrarlo. 

La Policía guarda absoluto mutismo para no dar pistas al posible autor o autores.