Povisa operará a pacientes del Cunqueiro y del Meixoeiro para bajar su lista de espera

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

GUSTAVO RIVAS

El Sergas contempla en el acuerdo con el hospital privado pagarle horas extras para que haga cirugías

25 dic 2018 . Actualizado a las 13:07 h.

El acuerdo al que han llegado el Servizo Galego de Saúde y el Povisa para evitar su entrada en concurso de acreedores contempla que el hospital privado opere a personas que están en la lista de espera en los hospitales Álvaro Cunqueiro y Meixoeiro, que conforman el Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi).

Esta medida forma parte del programa especial para la reducción de la lista de espera (Perle), que permite pagar las peonadas en los hospitales del Sergas, es decir, las horas extras gracias a las que en algunos quirófanos se opera por las tardes con el objetivo de reducir la lista de espera. El acuerdo firmado entre las dos partes contempla incluir a Povisa en este Perle, lo que le permitirá recibir dinero extra para cirugías. En realidad, el Sergas introdujo a Povisa en el programa especial en el mes de noviembre, cuando las negociaciones entre las dos partes todavía estaban en marcha. Le dio alrededor de medio millón de euros para gastar en pocas semanas.

Ahora abre una posibilidad novedosa, que consistiría en enviarle pacientes de la pública. «O acordo especifica tamén a realización de actividade adicional, como a atención a pacientes en lista de espera da EOXI de Vigo», dice el Sergas en referencia a la Estrutura Organizativa de Xestión Integrada, el organismo que gestiona los hospitales y centros de salud, y en cuya lista de espera se encuentran las personas que aguardan una operación en los hospitales públicos.

Las derivaciones a hospitales privados no han crecido en los últimos años, pero tampoco han menguado. En 2016 y 2017, los dos primeros de funcionamiento del nuevo hospital de Vigo, el Servizo Galego de Saúde derivó a 5.460 enfermos a los quirófanos de los hospitales privados Fátima (centro vigués del grupo Vithas) y Domínguez (centro pontevedrés de Quirónsalud), sobre todo de traumatología y de cirugía general y digestiva, según informe oficial. La dirección del área sanitaria ha argumentado reiteradamente que, con el objetivo de bajar la lista de espera, mandará a operar en hospitales privados a todos los enfermos que pueda. Claro que muchas veces el que se niega es el paciente. El hospital le puede ofrecer la derivación a un centro privado. Si la rechaza, sale de la lista de espera oficial y pasa a otra que el Sergas no publica y que se conoce como lista no estructural. Nadie avisa al paciente sobre esta circunstancia.

Puede operar más

Pero el hecho de que el hospital de destino sea Povisa es una novedad, ya que este centro atiende a un sector de la población para la sanidad pública. Fátima o Domínguez tienen actividad fundamentalmente privada, y el Sergas les remite algunos casos. El grueso de la actividad de Povisa es la pública, y gestiona su propia lista de espera.

Está por ver cómo gestiona el Sergas este programa: cuántos pacientes del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo deriva a Povisa y de qué especialidades. El Chuvi tiene programas propios para reducir la lista de espera, en especialidades como traumatología -que aglutina a uno de cada tres pacientes que están pendientes de una intervención- u oftalmología.

El hospital del Grupo Nosa Terra siempre ha transmitido que puede operar más de lo que opera, y que si no lo hace es porque el Sergas no le da dinero. De hecho, Povisa llegó a tener una lista de espera desmesurada. A finales del 2005 una operación tardaba de media diez meses. Esta situación solo se empezó a revertir cuando el Sergas puso dinero sobre la mesa e incluyó a Povisa en programas especiales, que le permitían pagar horas extras.

Hasta el año 2015, la lista de espera de Povisa era mayor que la del Chuvi. Ya entonces empezó a notarse la entrada en vigor del nuevo concierto con el Sergas, que permite a la administración sanitaria establecer objetivos al hospital privado igual que hace con los públicos. La lista de espera ha seguido bajando. De hecho, el Sergas ha marcado a Povisa terminar el año por debajo de 76 días de espera media para una intervención -en junio estaba en 81-, y de 80 días para el Chuvi -en junio eran 85-. Pero el Chuvi tiene 7.800 personas en lista de espera y Povisa 3.300.