El presidente portuario asegura seguir dispuesto a acoger el evento pero con más seguridad
21 dic 2018 . Actualizado a las 14:35 h.Puerto de Vigo y organización del festival O Marisquiño aún no se han reunido para abordar el diseño de la edición del año que viene. Así lo asegura Enrique López Veiga, presidente de la Autoridad Portuaria, al afirmar que desde el accidente que sufrió el festival en su última edición solo ha habido, recientemente, la petición de una reunión informal por parte de la empresa promotora de O Marisquiño, que finalmente no se produjo al preferir el Puerto que el encuentro tuviese en cambio carácter oficial.
«No ha habido ninguna conversación aún. Ni una palabra», afirma López Veiga, que a estas alturas prefiere que ese encuentro, de ser solicitado, no se produzca hasta después de su comparecencia en la comisión de investigación sobre el accidente creada por el Parlamento de Galicia. De momento no está programada la próxima reunión de dicha comisión y se descarta que vaya a producirse antes de un mes.
El responsable de la institución portuaria viguesa asegura que nada ha cambiado desde que unos días después del accidente mostrase su disposición a seguir cediendo terrenos portuarios para una nueva edición del festival urbano. «Yo mismo fui quien planteó al consejo de administración del puerto la necesidad de limitar el uso de nuestros terrenos para festivales, dado los problemas que causan a nuestros usuarios para el normal desarrollo de sus actividades. Pero planteé dos excepciones a dicha limitación: el Vigo Sea Fest, por su vinculación al mar, y O Marisquiño. Y eso no se ha revocado», subraya Enrique López Veiga.
Sin embargo, el presidente de la Autoridad Portuaria señala que si la organización del evento deportivo-cultural quiere optar por otro emplazamiento, su institución no se sentirá agraviada. «Si O Marisquiño se quiere ir a Samil, el Puerto encantado», llega a señalar el cargo designado por la Xunta, tras aseverar que para su última edición la empresa organizadora llegó a anunciarle que ya no necesitaban utilizar el paso de las Avenidas de Montero Ríos pues se planteaban volver al arenal donde nació el evento.
López Veiga argumenta su predisposición a respaldar un cambio de ubicación si lo consideran los promotores de O Marisquiño por los problemas que asegura se encuentran los usuarios del puerto a la hora de transportar piezas de dimensiones especiales y por el coste que genera la vigilancia de las instalaciones portuarias durante la celebración del festival. «Nos cuesta dinero y no nos reporta nada», concluye el presidente, que reitera que no se opone a ceder suelo de nuevo, «pero dado los antecedentes, con todo más especificado y con mayores medidas de seguridad».