Médicos

Eduardo Rolland
Eduardo Rolland LA BUJÍA

VIGO CIUDAD

14 dic 2018 . Actualizado a las 10:14 h.

No son médicos: son héroes. Veintitrés jefes de servicio del Sergas en Vigo dimitieron esta semana para «no ser cómplices» de una «situación insostenible». Y no es fácil encontrar en este mundo un acto de tanta valentía, honradez, coherencia y responsabilidad en el ejercicio de una profesión. Esos 23 héroes y heroínas, casi todos con una larga trayectoria, han renunciado a mucho para adoptar esta decisión. Porque no piden nada para ellos. Piden dignidad. Piden para los demás. No pueden seguir tolerando el deterioro de la sanidad en Vigo, producto de una política nefasta. La que lleva años practicando recortes temerarios, con un modelo de nuevo hospital más que discutible, entregando cien mil cartillas a la gestión de un policlínico privado (que ahora tiene poder para la amenaza), derivando sistemáticamente pacientes a la sanidad privada, colapsando los servicios de urgencia, deteriorando el traslado de enfermos crónicos, controlando de forma abusiva la prescripción de medicamentos, llevándose de Vigo toda suerte de especialidades o con listas de espera abominables, incluso después de maquilladas.

Pero lo peor ya empieza desde la base. Y esto es lo que denuncian estos médicos de contrastado prestigio. Hace años que todos vemos que la atención primaria no funciona. Que, para una gripe, te dan cita para una semana. Que no se cubren las bajas. Que los profesionales están desbordados. Que esto es un caos. Por eso asombra la displicencia con que han respondido el conselleiro y el presidente Feijoo. Y por eso emociona ver el sacrificio de grandes profesionales que nos hacen sentir orgullosos.