La falta de demanda del Peugeot 301 y el C-Elysee manda a casa a 350 obreros
19 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La fábrica de coches de PSA Peugeot Citroën cerrará una de sus dos líneas de producción del 23 de octubre al 4 de noviembre por falta de cargo de trabajo, según ha corroborado la propia empresas. Los motivos son la caída de la demanda de los dos modelos que se producen en esta línea, el Peugeot 301 y el Citroën C-Elysee. Estos coches que se fabrican en Vigo están destinados principalmente a los países ribereños del Mediterráneo, donde tradicionalmente han tenido buen aceptación. Sin embargo, la situación política en Turquía «con la devaluación de la moneda», según recalca PSA, ha provocado que el número de compradores haya descendido.
En estos momentos se producen unos 25 coches de este tipo, por lo que, con el paro previsto se dejarán de fabricar unos 250 vehículos. Esto afectará a más de 350 trabajadores. La línea 2, en cambio, estará plenamente operativa.
Durante el verano se produjo también una parada de la línea uno, pero en ese caso estuvo motivada por la falta de piezas para las cajas de cambio. Fuentes técnicas de la compañía indicaron que algunos modelos de cambio automático salieron defectuosos lo que originó que no pasen los controles de calidad precisos y hubiese que revisar la fabricación de estas piezas.
«La línea 1 va a estar parada por falta de carga de trabajo y van a mandar a los trabajadores indefinidos para casa del 23 de octubre al 4 de noviembre», recalcó Víctor Mariño, secretario de la Central Unitaria de Trabajadores. Mientras, la línea 2 de trabajo sufre una «saturación total» y ya no les llega con «hacer sábados, domingos y festivos» para sacar adelante el trabajo. Se trata de la línea que produce las nuevas furgonetas K-9 que tiene varios nombres comerciales, como Rifter, Berlingo o Combo.
«No es casual que manden a trabajadores indefinidos a casa y mantengan una plantilla de 1.800 eventuales», sostuvo Mariño, quien expresó su preocupación porque se produzca «otro ERE» tras las elecciones.
La CUT definió los comicios sindicales del domingo y lunes como un «proceso viciado» y ha vuelto a denunciar presiones de la empresa para que los trabajadores voten al SIT, el sindicato mayoritario en PSA Vigo. Critican «el control del voto de los últimos 36 años».