El desmarque de Zona Franca pone en riesgo una inversión de 12 millones

alejandro martínez DATA / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

La Xunta cree que el rechazo del consorcio al campus de FP es una decisión política tomada en alcaldía

16 oct 2018 . Actualizado a las 13:07 h.

El nuevo delegado de Zona Franca, David Regades, se desmarca del proyecto de la Xunta para crear el primer campus gallego de FP, dejando en el aire una inversión de más de 12 millones de euros. El delegado de la Xunta en Vigo, Ignacio López-Chaves, manifestó ayer que esta decisión, sustentada con «argumentos vagos», supondrá «un daño para la ciudad» y apelará al diálogo para que rectifique. «Mucho me temo que no haya sido tomada en la Zona Franca y por sus técnicos, sino en los despachos de la alcaldía socialista de Vigo», declaró.

El nuevo responsable de Zona Franca remitió un escrito el pasado 18 de septiembre al conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, informándole de que las actuaciones que puede desarrollar la institución que representa están relacionadas con el desarrolllo económico, «algo totalmente alleo ao proxecto educativo que vostede plantexa».

No obstante le invitaba en la misiva a poner en marcha la iniciativa al tratarse «dun proxecto de gran importancia para Galicia». Pero sin el apoyo de Zona Franca, el proyecto de crear un gran campus de FP en la ciudad nace cojo, en parte porque debería aportar 5,5 millones de euros.

Regades da marcha atrás a un proyecto que ya había sido acordado en una reunión del comité ejecutivo de Zona Franca y echando por tierra el trabajo realizado hasta ahora.

López Cháves destacó ayer que el proyecto estaba en marcha y que se habían celebrado múltiples reuniones entre ambas administraciones para redactar un convenio para su posterior tramitación y aprobación. Expresó que suponía un proyecto pionero en toda España que resulta vital para la ciudadanía porque implica formación, emprendimiento «y afecta directamente a las empresas».

Un puente

El campus iba a ser un puente entre el ámbito académico de la formación y el tejido industrial. Por eso en el proyecto se implicaba también a otras instituciones como la Universidad de Vigo, los centros de investigación tecnológicos de Vigo y su área, así como diversos colectivos empresariales. Abarcaría a 16 centros de formación profesional del entorno de la ciudad. «A través de este campus se modernizaría la oferta formativa y la conexión con el mundo de la empresa y el tejido innovador», destacó López Chaves.

Este centro tendría además dos áreas. Una de investigación e innovación para desarrollar proyectos, patentar las invenciones que tengan su origen en actividades vinculadas a la formación profesional e identificar las necesidades formativas que demandan las empresas. El segundo área en el que se desarrollaría el campus es el emprendimiento, que se materializaría en la puesta en marcha de un vivero de empresas industriales. «Que digan que esto no tiene nada que ver con la actividad económica que desarrolla la Zona Franca no es cierto. Está integramente incluido en su competencia».

El proyecto se incluiría dentro del recinto del CEIP Manuel Antonio en Vigo con una nueva superficie de 4.000 metros cuadrados destinados a la formación.

El delegado de la Xunta cree que es una decisión política de Zona Franca en contra de los intereses de Vigo que perjudica a la formación, al emprendimiento y al tejido empresarial.